Petróleo, geopolítica y riesgos imprevistos para la ArgentinaEl Banco Central de Rusia advirtió sobre una posible baja global en el precio del petróleo impulsada por Estados Unidos y la OPEP, lo que podría generar un escenario de incertidumbre para países productores como la Argentina. La estrategia energética de Trump y la relación entre Rusia y China suman más incógnitas a un tablero global en plena transformación.
Por Telma Luzzani
El Banco Central de Rusia advirtió al gobierno de su país que Estados Unidos y la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) "tienen la capacidad de elevar la producción de petróleo y generar un ciclo de precios muy bajos como en la década de 1980", según difundió Reuters, agencia que asegura haber visto el documento.
La noticia, que parece alarmista, abrió, no obstante, una serie de interrogantes y especulaciones que valen la pena analizar. Desde la asunción de Donald Trump en la Casa Blanca, y su bombardeo de decretos (140 en 100 días), los tiempos geopolíticos se han vuelto impredecibles y con final abierto.
Los medios de comunicación que responden a uno de los bandos del "deep state" ya no simulan "su independencia" y periódicos como The New York Times operan abiertamente contra Trump. La agencia Reuters (más allá de las acusaciones que pesan sobre ella como el "Reutersgate" por envío de noticias y fotos falsas) también juega y, en la noticia arriba mencionada, comparó -no ingenuamente- el actual escenario con los años 80 sugiriendo que Rusia podría caer como la Unión Soviética.
Sin embargo, dejando de lado cualquier teoría conspirativa, el informe del Banco Central de Rusia apunta a la necesidad de proyectar estrategias de mediano y largo plazo ante un entorno de posible volatilidad e incertidumbre. ¿Qué puede pasar en Argentina, en la región y a nivel mundial? Las consultas con varias fuentes especializadas arrojaron las siguientes alternativas.
"En los últimos cinco años, el bloque OPEP+ ha actuado consistentemente en un juego permanente de búsqueda de equilibrio entre oferta y demanda de crudo en un mercado muy volátil. Estos países, que explican algo más del 50 % de la oferta, han echado mano a políticas de recortes programados combinadas con aumentos controlados de la oferta al son de la evolución de la economía global. Por ende, sería poco probable que este grupo de países encare una estrategia de tipo productivista, lo que terminaría por horadar aún más sus ingresos fiscales", opinó uno de los especialistas argentinos que mejor conoce el tema.
Los planes de Trump
Durante su última campaña presidencial, Trump prometió (en consonancia con los planes de su primer mandato) buscar menores precios de energía para bajar costos y asegurar mayor capacidad industrial. Esto combinado con una política de tipo proteccionista.
No obstante, la estrategia de aumentar la oferta para que bajen los importes encuentra escollos dentro de ciertos bloques empresariales estadounidenses quienes temen que una disminución de los precios afecte negativamente la llegada de inversiones en la explotación del shale norteamericano.
A diferencia de los hidrocarburos tradicionales, el shale tiene curvas de rendimiento con caídas pronunciadas. Desde hace un tiempo, hay, en EEUU, quienes se preguntan si esta industria -que según estimaciones alcanzaría su pico hacia el 2030- podrá mantener esos niveles productivos.
"En ese sentido es probable que si EEUU encuentra una frontera en la producción de su propio mercado, necesite que Canadá y otros actores puedan ser funcionales a su estrategia de aumento de la producción. Este puede ser otro contexto posible que no puede dejar de ponerse en la mesa", según uno de los expertos.
El destino de Vaca Muerta
En relación a Argentina, si llegara a consolidarse algún tipo de disputa geoestratégica o una perspectiva como la mencionada por el Banco Central de Rusia, combinados con nuestra propia debilidad económica, podría generarse un panorama más que preocupante.
"Son escenarios abiertos que requieren análisis permanentes", aseguró otro de los consultados. "Los operadores locales -con YPF a la cabeza y con la petrolera "Vista" de Miguel Galuccio- piensan, en perspectiva de precios que no bajen de los 70 dólares por barril. Y lo cierto es que la actual situación, que combina debilidad interna creciente del gobierno con el complejo frente en relación a la cuestión cambiaria, dada la incapacidad concreta del sector exterior argentino para acumular reservas de manera sostenible, sumada a la dinámica regional e internacional, hace que entremos en un escenario de incertidumbre".
"Entonces, hoy en Argentina hay entre 4 o 5 operadores que están consolidando su estrategia en pos de tener un rol importante en los yacimientos de Vaca Muerta, mientras que otras empresas, como la malaya Petronas y otras locales o internacionales, están reviendo sus proyectos de inversión hidrocarburífera en nuestro país."
"Si a este contexto se suma, en los próximos tiempos, una depresión del precio, y la frontera en torno a los 60 dólares el barril se perforara, sin dudas, la situación de Vaca Muerta se complejizaría y mucho. Sería la aceleración o intensificación de una película que en Argentina ya vimos en otros momentos de nuestra historia."
Sobre Rusia y China
El último informe difundido por la OPEP+ (organización liderada por Arabia Saudita y Rusia), evalúa recuperar, a partir de abril 2025, la oferta productiva, en función de la dinámica de precios, con la posibilidad de que se incorporen, de manera gradual, unos 2.2 millones de barriles de petróleo por día a al mercado global, a partir de una canasta de ofertas que va a ser compartida por algunos integrantes de OPEP+.
En este marco, la situación de Rusia es delicada ya que, por un lado, debe conjurar el peligro que las sanciones le han impuesto a su económica y, por otro, debe asegurar su rol equilibrador en el mercado, maximizando un nivel de precios que, nunca debe estar debajo de los 70 o 65 dólares, cifra clave para mantener su presupuesto y sus ingresos fiscales.
Por otra parte, también las vulnerabilidades de China juegan en este panorama. La gran nación emergente necesita una provisión abundante y permanente de hidrocarburos algo que, sobre todo a partir de 2022, ha resuelto al encontrar en Rusia un actor confiable.
¿Hasta dónde la estrategia Trump puede interferir en esa "amistad inquebrantable", en palabras del líder chino Xi Jinping, entre Beijing y Moscú? La actual aproximación del estadounidense a su par ruso, Vladimir Putin; sus apelaciones a la "colaboración" y, por otro lado, las presiones y amenaza norteamericanas, ¿pueden deteriorar el vínculo sino-ruso?
Son tiempos de incertidumbre mundial y, en ese contexto, el plan de una Argentina desindutrializada, anclada en una economía primarizada, basada en bienes cuyos devenires son inestables, puede ser fatal para nuestro pueblo.
Fuente: El Destape
El Banco Central de Rusia advirtió sobre una posible baja global en el precio del petróleo impulsada por Estados Unidos y la OPEP, lo que podría generar un escenario de incertidumbre para países productores como la Argentina. La estrategia energética de Trump y la relación entre Rusia y China suman más incógnitas a un tablero global en plena transformación.
Por Telma Luzzani
El Banco Central de Rusia advirtió al gobierno de su país que Estados Unidos y la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) "tienen la capacidad de elevar la producción de petróleo y generar un ciclo de precios muy bajos como en la década de 1980", según difundió Reuters, agencia que asegura haber visto el documento.
La noticia, que parece alarmista, abrió, no obstante, una serie de interrogantes y especulaciones que valen la pena analizar. Desde la asunción de Donald Trump en la Casa Blanca, y su bombardeo de decretos (140 en 100 días), los tiempos geopolíticos se han vuelto impredecibles y con final abierto.
Los medios de comunicación que responden a uno de los bandos del "deep state" ya no simulan "su independencia" y periódicos como The New York Times operan abiertamente contra Trump. La agencia Reuters (más allá de las acusaciones que pesan sobre ella como el "Reutersgate" por envío de noticias y fotos falsas) también juega y, en la noticia arriba mencionada, comparó -no ingenuamente- el actual escenario con los años 80 sugiriendo que Rusia podría caer como la Unión Soviética.
Sin embargo, dejando de lado cualquier teoría conspirativa, el informe del Banco Central de Rusia apunta a la necesidad de proyectar estrategias de mediano y largo plazo ante un entorno de posible volatilidad e incertidumbre. ¿Qué puede pasar en Argentina, en la región y a nivel mundial? Las consultas con varias fuentes especializadas arrojaron las siguientes alternativas.
"En los últimos cinco años, el bloque OPEP+ ha actuado consistentemente en un juego permanente de búsqueda de equilibrio entre oferta y demanda de crudo en un mercado muy volátil. Estos países, que explican algo más del 50 % de la oferta, han echado mano a políticas de recortes programados combinadas con aumentos controlados de la oferta al son de la evolución de la economía global. Por ende, sería poco probable que este grupo de países encare una estrategia de tipo productivista, lo que terminaría por horadar aún más sus ingresos fiscales", opinó uno de los especialistas argentinos que mejor conoce el tema.
Los planes de Trump
Durante su última campaña presidencial, Trump prometió (en consonancia con los planes de su primer mandato) buscar menores precios de energía para bajar costos y asegurar mayor capacidad industrial. Esto combinado con una política de tipo proteccionista.
No obstante, la estrategia de aumentar la oferta para que bajen los importes encuentra escollos dentro de ciertos bloques empresariales estadounidenses quienes temen que una disminución de los precios afecte negativamente la llegada de inversiones en la explotación del shale norteamericano.
A diferencia de los hidrocarburos tradicionales, el shale tiene curvas de rendimiento con caídas pronunciadas. Desde hace un tiempo, hay, en EEUU, quienes se preguntan si esta industria -que según estimaciones alcanzaría su pico hacia el 2030- podrá mantener esos niveles productivos.
"En ese sentido es probable que si EEUU encuentra una frontera en la producción de su propio mercado, necesite que Canadá y otros actores puedan ser funcionales a su estrategia de aumento de la producción. Este puede ser otro contexto posible que no puede dejar de ponerse en la mesa", según uno de los expertos.
El destino de Vaca Muerta
En relación a Argentina, si llegara a consolidarse algún tipo de disputa geoestratégica o una perspectiva como la mencionada por el Banco Central de Rusia, combinados con nuestra propia debilidad económica, podría generarse un panorama más que preocupante.
"Son escenarios abiertos que requieren análisis permanentes", aseguró otro de los consultados. "Los operadores locales -con YPF a la cabeza y con la petrolera "Vista" de Miguel Galuccio- piensan, en perspectiva de precios que no bajen de los 70 dólares por barril. Y lo cierto es que la actual situación, que combina debilidad interna creciente del gobierno con el complejo frente en relación a la cuestión cambiaria, dada la incapacidad concreta del sector exterior argentino para acumular reservas de manera sostenible, sumada a la dinámica regional e internacional, hace que entremos en un escenario de incertidumbre".
"Entonces, hoy en Argentina hay entre 4 o 5 operadores que están consolidando su estrategia en pos de tener un rol importante en los yacimientos de Vaca Muerta, mientras que otras empresas, como la malaya Petronas y otras locales o internacionales, están reviendo sus proyectos de inversión hidrocarburífera en nuestro país."
"Si a este contexto se suma, en los próximos tiempos, una depresión del precio, y la frontera en torno a los 60 dólares el barril se perforara, sin dudas, la situación de Vaca Muerta se complejizaría y mucho. Sería la aceleración o intensificación de una película que en Argentina ya vimos en otros momentos de nuestra historia."
Sobre Rusia y China
El último informe difundido por la OPEP+ (organización liderada por Arabia Saudita y Rusia), evalúa recuperar, a partir de abril 2025, la oferta productiva, en función de la dinámica de precios, con la posibilidad de que se incorporen, de manera gradual, unos 2.2 millones de barriles de petróleo por día a al mercado global, a partir de una canasta de ofertas que va a ser compartida por algunos integrantes de OPEP+.
En este marco, la situación de Rusia es delicada ya que, por un lado, debe conjurar el peligro que las sanciones le han impuesto a su económica y, por otro, debe asegurar su rol equilibrador en el mercado, maximizando un nivel de precios que, nunca debe estar debajo de los 70 o 65 dólares, cifra clave para mantener su presupuesto y sus ingresos fiscales.
Por otra parte, también las vulnerabilidades de China juegan en este panorama. La gran nación emergente necesita una provisión abundante y permanente de hidrocarburos algo que, sobre todo a partir de 2022, ha resuelto al encontrar en Rusia un actor confiable.
¿Hasta dónde la estrategia Trump puede interferir en esa "amistad inquebrantable", en palabras del líder chino Xi Jinping, entre Beijing y Moscú? La actual aproximación del estadounidense a su par ruso, Vladimir Putin; sus apelaciones a la "colaboración" y, por otro lado, las presiones y amenaza norteamericanas, ¿pueden deteriorar el vínculo sino-ruso?
Son tiempos de incertidumbre mundial y, en ese contexto, el plan de una Argentina desindutrializada, anclada en una economía primarizada, basada en bienes cuyos devenires son inestables, puede ser fatal para nuestro pueblo.
Fuente: El Destape