A 28 años del asesinato, Cabezas sigue presenteA 28 años del asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas, su hermana Gladys participó de un acto en Pinamar y dijo que "nos van a seguir viendo acá" todos los años "porque los asesinos deberían estar presos hasta 2034, cuando se cumpliría la condena, pero están todos libres". Por su parte, su compañero de trabajo en aquella temporada de verano en la costa, Gabriel Michi, lo recordó y dijo que "la herida sigue abierta" y reclamó justicia por el asesinato de su colega en 1997 tras realizar una foto del empresario Alfredo Yabrán. "Esto reedita lo que vivimos en la década del ‘90", reflexionó Michi.
Cabezas cubría la temporada cuando el 25 de enero de 1997 fue asesinado por una banda vinculada a Alfredo Yabrán, un empresario tan poderoso como enigmático cuya imagen dejó de ser un misterio gracias al trabajo del reportero que lo identificó y fotografió en la playa. La investigación dio con los autores materiales de la ejecución y sindicó como autor intelectual a Yabrán, que se suicidó cuando su arresto era inminente.
El acto fue realizado en el santuario en honor a Cabezas, que está cerca de la terminal de Pinamar. Fue encabezado por Gladys Cabezas, que fue acompañada por familiares y el intendente de la ciudad, Juan Ibarguren. "Acá matar es gratis, salís con el 2x1... Sin embargo, seguimos. Yo necesito venir acá todos los años, mi hermano lo necesita, mis padres, que murieron de tristeza, también lo necesitan. Y vamos a seguir nombrando a todos estos asesinos, que hasta 2034 tendrían que estar en su lugar, en la cárcel", afirmó la hermana.
En el homenaje también se leyó una carta de Gabriel Michi, quién afirmó que "fue el peor ataque contra el periodismo y contra la libertad de expresión desde el retorno a la democracia en la Argentina". Y agregó: "fue y es un ejemplo de interés y de búsqueda de justicia, siempre de manera pacífica y respetando las instituciones".
Gladys lo recordó como "una persona alegre y buena", además de expresarse sobre los malos manejos de la Justicia. En declaraciones radiales, cuestionó. "Esta justicia es lenta y no sirve para nada. No hay ningún detenido hace rato". Asimismo, añadió: "Tenemos un estado completamente ausente".
Días antes de este nuevo aniversario, Gladys había contado que su hijo tuvo un incómodo encuentro con Horacio Braga, quien le dijo en una charla casual, sin saber que era familiar del reportero: "Yo estuve detenido. Fui uno de los que mató a Cabezas". Fue en un recital de Baradero.
Una herida abierta
Para Michi, "a 28 años, esto sigue siendo una herida que no cicatriza". "Cuando ocurrió el asesinato, yo tenía 28 años. Era muy joven, y hoy se cumplen 28 años de aquel día. La mitad de mi vida estuvo marcada por esta tragedia", expresó. Además, destacó el vínculo personal que lo unía a José Luis, con quien había trabajado en múltiples coberturas periodísticas. "Aunque no éramos amigos íntimos, compartimos mucho, incluso viajes al exterior. Teníamos una relación muy cercana. Hoy sigo vinculado con su familia; somos como familias ensambladas por el dolor", contó.
Michi considera que el caso de José Luis Cabezas trascendió lo personal y se convirtió en un hecho histórico. "Lo que ocurrió con José Luis generó un impacto único en la sociedad argentina. Nunca en la historia del mundo ocurrió algo como esto: que una sociedad entera se movilice en defensa de un periodista", afirmó en declaraciones radiales. "Hoy José Luis es un icono, un referente, con más de 75 lugares que llevan su nombre: calles, barrios y plazas en todo el país. Es increíble ver cómo alguien que era mi compañero se convirtió en un símbolo tan importante", destacó.
Por otra parte, ayer también se realizó un acto en la Ciudad de Buenos Aires organizado por Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina, en la que sus compañeros lo recordaron y homenajearon. "Son contextos difíciles, en cada manifestación nos han reprimido" y "no queremos que haya otro José Luis asesinado por el poder económico concentrado", destacó Sebastián Vricella, titular de la asociación. "Este homenaje es una forma de mantenerlo vivo", dijo Vricella y agregó: "Vivimos tiempos parecidos a los de los ‘90, contextos difíciles. En cada manifestación de 2024 nos han reprimido, nos ha cagado a palos este Estado opresor".
Fuente: Página/12
A 28 años del asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas, su hermana Gladys participó de un acto en Pinamar y dijo que "nos van a seguir viendo acá" todos los años "porque los asesinos deberían estar presos hasta 2034, cuando se cumpliría la condena, pero están todos libres". Por su parte, su compañero de trabajo en aquella temporada de verano en la costa, Gabriel Michi, lo recordó y dijo que "la herida sigue abierta" y reclamó justicia por el asesinato de su colega en 1997 tras realizar una foto del empresario Alfredo Yabrán. "Esto reedita lo que vivimos en la década del ‘90", reflexionó Michi.
Cabezas cubría la temporada cuando el 25 de enero de 1997 fue asesinado por una banda vinculada a Alfredo Yabrán, un empresario tan poderoso como enigmático cuya imagen dejó de ser un misterio gracias al trabajo del reportero que lo identificó y fotografió en la playa. La investigación dio con los autores materiales de la ejecución y sindicó como autor intelectual a Yabrán, que se suicidó cuando su arresto era inminente.
El acto fue realizado en el santuario en honor a Cabezas, que está cerca de la terminal de Pinamar. Fue encabezado por Gladys Cabezas, que fue acompañada por familiares y el intendente de la ciudad, Juan Ibarguren. "Acá matar es gratis, salís con el 2x1... Sin embargo, seguimos. Yo necesito venir acá todos los años, mi hermano lo necesita, mis padres, que murieron de tristeza, también lo necesitan. Y vamos a seguir nombrando a todos estos asesinos, que hasta 2034 tendrían que estar en su lugar, en la cárcel", afirmó la hermana.
En el homenaje también se leyó una carta de Gabriel Michi, quién afirmó que "fue el peor ataque contra el periodismo y contra la libertad de expresión desde el retorno a la democracia en la Argentina". Y agregó: "fue y es un ejemplo de interés y de búsqueda de justicia, siempre de manera pacífica y respetando las instituciones".
Gladys lo recordó como "una persona alegre y buena", además de expresarse sobre los malos manejos de la Justicia. En declaraciones radiales, cuestionó. "Esta justicia es lenta y no sirve para nada. No hay ningún detenido hace rato". Asimismo, añadió: "Tenemos un estado completamente ausente".
Días antes de este nuevo aniversario, Gladys había contado que su hijo tuvo un incómodo encuentro con Horacio Braga, quien le dijo en una charla casual, sin saber que era familiar del reportero: "Yo estuve detenido. Fui uno de los que mató a Cabezas". Fue en un recital de Baradero.
Una herida abierta
Para Michi, "a 28 años, esto sigue siendo una herida que no cicatriza". "Cuando ocurrió el asesinato, yo tenía 28 años. Era muy joven, y hoy se cumplen 28 años de aquel día. La mitad de mi vida estuvo marcada por esta tragedia", expresó. Además, destacó el vínculo personal que lo unía a José Luis, con quien había trabajado en múltiples coberturas periodísticas. "Aunque no éramos amigos íntimos, compartimos mucho, incluso viajes al exterior. Teníamos una relación muy cercana. Hoy sigo vinculado con su familia; somos como familias ensambladas por el dolor", contó.
Michi considera que el caso de José Luis Cabezas trascendió lo personal y se convirtió en un hecho histórico. "Lo que ocurrió con José Luis generó un impacto único en la sociedad argentina. Nunca en la historia del mundo ocurrió algo como esto: que una sociedad entera se movilice en defensa de un periodista", afirmó en declaraciones radiales. "Hoy José Luis es un icono, un referente, con más de 75 lugares que llevan su nombre: calles, barrios y plazas en todo el país. Es increíble ver cómo alguien que era mi compañero se convirtió en un símbolo tan importante", destacó.
Por otra parte, ayer también se realizó un acto en la Ciudad de Buenos Aires organizado por Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina, en la que sus compañeros lo recordaron y homenajearon. "Son contextos difíciles, en cada manifestación nos han reprimido" y "no queremos que haya otro José Luis asesinado por el poder económico concentrado", destacó Sebastián Vricella, titular de la asociación. "Este homenaje es una forma de mantenerlo vivo", dijo Vricella y agregó: "Vivimos tiempos parecidos a los de los ‘90, contextos difíciles. En cada manifestación de 2024 nos han reprimido, nos ha cagado a palos este Estado opresor".
Fuente: Página/12