Minería

Cómo se logró la derogación de la ley pro minera

Por Francisco Pandolfi*

Frente a una Ley pro minera apoyada por el Gobierno nacional, el Gobierno provincial, el aparato judicial y el policial, por el sistema mediático y el lobby de las corporaciones, la sociedad ganó las calles y logró lo impensable: que la misma Legislatura que aprobó esa Ley la derogase una semana después. ¿Cómo se llegó a semejante triunfo de una comunidad? Algunas claves: lo asambleario, la horizontalidad de las decisiones, la convicción y el conocimiento.

Una procesión de alegría. De abrazos y alaridos. De bombos y redoblantes. De banderas y pancartas. Cambia el nombre de la ciudad, la geografía, pero la esencia es la misma. En cada localidad chubutense, cientos, miles de personas caminan pausadamente, como quien busca que la movilización sea eterna. Abuelas, adultos, jóvenes, infancias. Parejas, amistades, familias enteras. Ríen al grito de "si este no es el pueblo, el pueblo dónde está". Cantan: "Luche, luche, luche y que se escuche"; agitan, que "el pueblo, unido, jamás será vencido". Hasta reapareció el "que se vayan todos". No es para menos: el "Chubutazo" dejará un precedente para todo el país, que se suma al de Mendoza en 2019. La misma Legislatura provincial que había habilitado la megaminería, derogó la ley por unanimidad a causa de la presión popular.

Y como las victorias se celebran, hay fiesta en todo Chubut.

Conocimiento y expectativas

La resistencia de la provincia a la megaminería lleva casi 20 años. La batalla inicial se ganó en Esquel, el primero de los reiterados "No es No". Viviana Moreno integra la asamblea del No a la mina de Esquel y le cuenta a lavaca cómo creció aquella semilla: "Nuestro camino está basado en el conocimiento que tenemos sobre de qué se trata la megaminería; sabemos bien claro a qué nos oponemos, y por qué nos oponemos. La difusión de la información es permanente y la sostuvimos durante todo este tiempo; el crecimiento de la concientización nunca se detuvo". Esto incluye, por ejemplo, la creación de la página noalamina, publicación de manuales como Hablemos de megaminería, libros infantiles, documentales, charlas en barrios y escuelas y todo lo que con mayúsculas puede entrar en el terreno de la Comunicación.

¿Cuál fue la receta para derribar la ley en menos de una semana? "El trabajo horizontal, que no es nada fácil. Somos muchas comunidades, identidades e idiosincrasias diversas que debemos consensuar. La asamblea potencia, no hay nada más enriquecedor que lo que se define ahí; más numerosa y heterogénea, más rica es, porque si miramos desde distintos ángulos, es más fácil tomar decisiones acertadas. El consenso lleva tiempo, pero se llega porque tenemos un objetivo común que es la defensa del agua".

Esa defensa fue total. La sintetiza Viviana: "Superó todas mis expectativas; lo que más me sorprendió fue la gran manifestación en una ciudad extractivista como Comodoro Rivadavia, que vive del petróleo. Hasta ahora no habíamos tomado dimensión de cuánta gente defiende los recursos naturales".

La democracia es la calle

Comodoro Rivadavia es la ciudad de Chubut con mayor población. Allí vive Silvia de los Santos, abogada, integrante de la Unión de Asambleas de Comunidades de Chubut (UACCh). Dice que jamás vio algo igual. "Nunca en nuestra ciudad hubo columnas de tres cuadras, marchando día a día. Somos la capital nacional del petróleo, la mayoría de las familias vive de esa actividad o tiene algún familiar vinculado a alguna empresa. Es muy difícil que la gente salga a la calle, ya que acá siempre hubo empleo cuando en otros lados no. Sin embargo, la faltante de agua es en toda la provincia. Incluso, acá en Comodoro hace pocos días no hubo agua durante una semana en algunos barrios, y está habiendo cortes programados por la escasez".

Silvia también es parte de la Red de Abogados por la Soberanía Alimentaria. Dice estar agotada, pero feliz. Todavía el cansancio lo siente en el cuerpo y en la mente. "Pasamos muchos días de angustia, muy terribles. Resistimos en asambleas horizontales, que son transgeneracionales porque hay desde mayores de 80 hasta los más jóvenes. Convocamos a la gente a que se sume y así lo hizo, con carteles, movilizando con sus hijos, llevando los carritos de bebé, con sus perritos, saliendo a defenderse".

Concluye: "Demostramos que la democracia está en la calle, no en los poderes, y que los pueblos tenemos el potencial de definir nuestro propio destino, incluso ante la dictadura extractivista impuesta por los grupos económicos".

La zonificación votada por el Poder Legislativo avaló la megaminería en la meseta central, donde la empresa canadiense Pan American Silver ya se preparaba para activar el Proyecto Navidad de explotación de plata, cobre y plomo.

Lo que no tiene dueño

Las y los trabajadores también jugaron un rol importante en dar vuelta la historia. Tomás Montenegro es el secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Chubut. Describe una de las causas principales del triunfo: "No hay persona ni partido que puede adjudicárselo, porque la lucha no tiene dueño. Hicimos una pueblada inmensa, porque si sacás el porcentaje de gente movilizada respecto a la cantidad de habitantes, te das cuenta que la concurrencia fue tremendamente alta. Llegamos hasta acá por la conciencia colectiva construida en estas dos décadas". La conexión con el pasado reciente es inevitable: "A 20 años de que la Argentina gritara ‘que se vayan todos‘, en muchos lugares se volvió a cantar lo mismo, como rechazo a la dirigencia política que nos trajo hasta aquí, sin escuchar y avasallando nuestra voz".

Desde Rawson, la capital de la provincia y foco de las movilizaciones más gruesas, habla con "las emociones a flor de piel" Pablo Palicio Lada, integrante de la UACCh (Unión de Asambleas Ciudadanas Chubutenses) y referente histórico que arrancó con la militancia antinuclear en el siglo pasado: "Cuando se toman las riendas para ser protagonistas del propio destino, suceden este tipo de cosas. Cuando nos empiezan a tener miedo, porque no tenemos miedo, la fuerza popular se hace imparable. Así construimos el ‘Chubutazo'".

(*) Publicada por La Vaca (www.lavaca.org) el 19/01/2022.