PECOM desembarca en Chubut: enfrenta el desafío de revertir la desinversión y la baja productiva Finalmente, la semana que se inicia marcará un punto de inflexión en la salida de YPF de Chubut con la reversión del área El Trébol-Escalante para ser reconcesionada a la empresa PECOM. La petrolera del Grupo Pérez Companc desembarcará en territorio chubutense para explotar dicha área, apostando a reconvertirse en una operadora del sector hidrocarburífero nacional y volcando sus principales esfuerzos a conseguir aumentar la producción de los yacimientos a partir de la explotación terciaria con polímeros. El desafío para esta operación de áreas maduras es importante porque la provincia sigue decreciendo en sus ritmos de producción de crudo Escalante y en paralelo se achican las regalías que ingresan a las arcas estatales. La perspectiva es incierta en cuanto tiempo se verán los primeros resultados en el terreno de la producción y cómo impactará en materia laboral. Tampoco se conocen aún detalles sobre la real dimensión y la remediación del pasivo ambiental que dejará la YPF tras más de 90 años de explotación petrolera.
Largos meses transcurrieron desde la actual conducción de YPF, a cargo de Horacio Marín, decidió abandonar la mayoría de los yacimientos que contrala en Chubut para focalizarse casi con exclusividad en los hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta.
Tras un proceso tedioso, bastante confidencial y con poca información oficial sobre los valores y las condiciones de la venta, el lunes YPF terminará de oficializar el traspaso del área de El Trébol-Escalante que será operada por la compañía PECOM, perteneciente al Grupo Pérez Companc.
Esta será la primera área que YPF transfiera a otra compañía en el marco del Plan Andes de desinversión en diferentes zonas del país, aunque todavía le queda bastante camino por recorrer para desprenderse de las 55 áreas que tiene en carpeta -particularmente las de Santa Cruz- y para ello pondría en marcha el Plan Andes 2 que buscará que en el 2025 están todas las áreas transferidas.
Esta previsto que al traspaso asistan el gobernador Ignacio Torres, el CEO de YPF (Horacio Marín), referentes sindicales y autoridades de la provincia; para que luego se concrete el empoderamiento de PECOM como concesionaria de los yacimientos involucrados y que fueran operados por la petrolera estatal desde principios de la década de 1930.
YPF tiene ahora entre ceja y ceja explotar Vaca Muerta y busca concretar la quimera de convertir al país en uno de los principales jugadores de la exportación de gas natural licuado y crudo no convencional desde la formación neuquina. Para lograrlo se desprende de la casi totalidad de las áreas maduras que le dieron origen tras su fundación en junio de 1922.
Ver: ¿Otra estafa para reprivatizar? YPF se va de Chubut y Santa Cruz bajando las reservas
Con una lógica bien de mercado y con las prioridades puestas en Vaca Muerta para generar dólares que ingresen al país, YPF se aleja en primera instancia de del área de El Trébol-Escalante; pero se supone en poco tiempo más hará lo mismo con la de Campamento Central-Cañadón Perdido que incluye donde se produjo el descubrimiento del petróleo en 1907.
Por ahora la entrega de la segunda concesión, que se prevé que también irá a parar a manos de PECOM, se encuentra demorada porque allí comparte la propiedad de la misma en 50% con la petrolera chilena Enap Sipetrol; quien se encuentra de salida de la Argentina, pero que aún no terminó de dar el visto bueno definitivo para el traspaso propuesto por YPF.
La petrolera con mayoría accionaria estatal se va casi completamente de Chubut, aunque por ahora seguirá manejando la concesión de Manantiales Behr en el territorio provincial; pero su salida deja un enorme pasivo ambiental de casi un siglo y resultados muy malos para la provincia en cuanto a niveles de producción, reservas e inversiones.
¿Qué deja YPF en Chubut?
En lo que respecta al área de El Trébol-Escalante el resultado productivo que deja YPF en los primeros nueve meses del año es muy malo. Este año se extrajeron 1.774.313 barriles de crudo que resultaron ser un 10,9% menores a los 1.992.423 barriles del mismo período del año pasado; reflejando una merma interanual de 218.110 barriles.
En cuanto al área de Campamente Central-Cañadón Perdido los resultados interanuales son aún peores. En los primeros nueve meses YPF tuvo una producción de 762.029 barriles que fueron un 12,6% más acotados que los 872.055 barriles del mismo período del 2023; indicando una contracción de 110.026 barriles.
Si la comparación se extiende con los primeros nueve meses del 2019 -año anterior a la pandemia-, en El Trébol-Escalante el achicamiento de la producción fue del 29,1% (-727.356 barriles) y del 46,7% en Campamento Central-Cañadón Perdido (-667.029 barriles).
Respecto del 2012, cuando YPF comenzó a volcar sus inversiones en Vaca Muerta, el retroceso en las dos áreas en cuestión fue del 20,6% (-461.491 barriles) y del 43,3% (-582.171 barriles) respectivamente.
En lo que respecta a las inversiones para este año YPF comprometió tan sólo 28,8 millones de dólares en El Trébol-Escalante y otros 33,3 millones en Campamento Central-Cañadón Perdido; mientras que el año pasado concretó inversiones por 73,5 y 30,7 millones de dólares respectivamente. La caída de las inversiones fue del 38,6% interanual.
Los números de YPF son indudablemente muy malos para la provincia y revertirlos será uno de los desafíos centrales para el Estado provincial como poder concedente y para PECOM como la nueva concesionaria; tanto para aumentar los niveles productivos como para incrementar los puestos de trabajo en dichos yacimientos.
Junto a estos guarismos de la petrolera que conduce Marín -ex CEO de Tecpetrol perteneciente al Grupo Techint- se deben adosar los pasivos ambientales que ronda un siglo de explotación petrolera en Chubut, los que por ahora no se han dimensionado públicamente ni tampoco se ha conocido el plan de remediación que se debió acordar con la compañía que abandona la concesión de las áreas en cuestión.
Ver: Todo planeado: YPF desplomó un 40% su inversión en 2024 y abandona las áreas maduras de Chubut
PECOM se la juega a ser operadora y la explotación terciaria
PECOM es una empresa del Grupo Pérez Companc que fue fundado en 1946. Jorge y Carlos Pérez Companc dan vida a la naviera del mismo nombre y en 1958 ponen en marcha la petrolera del holding empresario que se dedicaba a la perforación y terminación de pozos petrolíferos.
Su gran impulsor fue el fallecido Gregorio "Goyo" Pérez Companc, que según Luis Majul -en el libro "Los dueños de la Argentina"- fue adoptado por la francesa Margarita Companc de Pérez Acuña y por Ramón Pérez Acuña, quienes le dieron su apellido.
La revista Forbes posicionó a "Goyo" Pérez Companc como la tercera persona más rica del país, con una fortuna que ascendía a los 3.900 millones de dólares hasta el 2024 y que ocupaba el puesto 809 de los millonarios del mundo.
En el año 2015 nació PECOM luego que el grupo adquiriera los activos de la empresa Skanska y en el 2018 compró a la empresa de servicios petroleros Bolland para expandir sus actividades a Bolivia, Brasil y Colombia.
El CEO al mando de PECOM, Gustavo Astie, indicó sobre el desembarco en Chubut que buscarán convertir a la compañía en una "operadora", donde debería consolidarse en el rubro del Upstream.
"El mandato que tengo es que PECOM vuelva a ser lo que fue. Así que tendré que ofrecer una compañía muy grande, vamos a ver hasta dónde podemos llegar. Pero PECOM hoy tiene presencia en Brasil y en Argentina, y creo que hay muchas oportunidades en ambos países", relató.
"La fase 2 está todo ocurriendo al mismo tiempo: es la transformación a una operadora, que es el mandato que tengo del accionista, y crecer en el rubro del oil & gas", remarcó en una entrevista realizada por el portal especializado Mejor Energía.
"Si todo sale bien, lo estamos completando la semana que viene, haciéndonos cargo del primer yacimiento en la provincia de Chubut: El Trébol-Escalante", añadió entorno de la firma que se concretará con el inicio de la semana.
El directivo sostuvo que "el concepto de campos maduros es un poco relativo porque hay yacimientos en la Cuenca del Golfo que tienen determinadas condiciones de petróleo donde el factor de recobro se puede duplicar".
La explotación terciaria, utilizando polímeros y agua, será una de las prioridades para hacer funcionar los campos maduros de Chubut. "Yo creo que, insisto, con determinadas condiciones de petróleo, de presión, de temperatura y de reservorio, la terciaria es un mecanismo de recuperación muy interesante. Vimos resultados Manantiales Behr, de YPF, que es una cosa espectacular", sintetizó.
Incentivos para los polímeros
Preparando el terreno para el desembarco de PECOM, el gobernador Ignacio Torres anunció hace escasas semanas atrás que había conseguido que el Gobierno nacional flexibilice las condiciones y los cánones para la importación de los polímeros que son una pieza clave para la extracción terciaria en los yacimientos de la provincia.
Con el Decreto 908/2024, publicado en el Boletín Oficial del 16 de octubre, Nación eliminó los aranceles para la importación de polímeros, lo que beneficiará a PECOM y las demás petroleras que se adentren en la extracción de crudo bajo la técnica terciaria.
Fuentes especializadas aseguraron que en la provincia se demandan alrededor de 60 toneladas por día de polímeros para hacer brotar, combinadas con agua y calor, el viscosos crudo Escalante de las áreas maduras.
La quita del arancel que se ubicaba en el 14% para la importación, junto a la baja del impuesto PAIS para la importación de bienes y fletes que descendió del 17,5 al 7,5%, posibilitaría reducir marcadamente los costos de producción y de esa manera se maximizaría la rentabilidad de las perforaciones en los yacimientos vinculados a la explotación terciaria.
En Chubut alrededor del 12% de toda la producción petrolera esta traccionada por la terciaria y gracias a ese proceso CAPSA consiguió desde el 2007 -primera experiencia terciaria en el país- evitar que se desplomen aún más los ritmos de producción, mientras que YPF los aplicó de manera consistente desde el 2019 en Manantiales Behr y consiguió muy buenos resultados.
Si bien en el 2024 tanto CAPSA como YPF mostraron caídas de producción del 11,6 y del 10% respectivamente a lo largo de los primeros nueve meses del año; respecto del 2019 YPF consiguió aumentar los niveles extractivos en Manantiales Behr en un 17,5%, pero CAPSO decreció un 19,4% en Diadema. Entorno de los ritmos productivos del 2012, YPF obtuvo una mejoría del 25% y CAPSA un decrecimiento del 7,9%.
¿Quita de regalías?
El otro aliciente que podría entrar a jugar un papel importante para PECOM en Chubut es el régimen de disminución de regalías petroleras que instrumentó el gobernador Mariano Arcioni en el 2021 para la producción incremental en los yacimientos maduros.
El Decreto 278/2021 -firmado en abril de ese mismo año- puso en marcha en la provincia un esquema de reducción del pago de regalías petroleras de hasta el 6% para achicarlas a la mitad en el marco del Programa de promoción para la industria hidrocarburífera.
Los resultados no fueron auspiciosos a que la producción petrolera en la provincia siguió decreciendo y particularmente en el caso de Tecpetrol, con la que Arcioni instrumentó en diciembre del 2023 (Decreto 1068/2022) un programa especial para fomentar la extracción de crudo en los yacimientos La Tapera y Puesto Quiroga, posibilitándole a la compañía pagar solamente el 6% de regalías por diez años en los pozos perforados hasta julio del 2027; aunque hasta ahora no se lograron los objetivos incrementales propuestos.
No está claro si la explotación terciaria que encare PECOM podrá estar alcanzada o no por el primer decreto de Arcioni del año 2021, ya que si así fuera la petrolera del Grupo Pérez Companc podría verse beneficiada con el pago de la mitad de las regalías petroleras a cambio de aumentar los ritmos productivos y la generación de puestos de trabajo.
Para que eso suceda, Torres debería modificar el decreto de Arcioni porque allí se establecía que las operadoras podían ingresar sus proyectos al Programa de promoción para la industria hidrocarburífera hasta el 30 de septiembre del 2021; aunque el propio ex gobernador firmó pasado ese plazo el acuerdo con Tecpetrol donde le bajó las regalías a la mitad en La Tapera y Puesto Quiroga por diez años.
Allí quizás vaya a encontrarse un nuevo beneficio para PECOM que sumado al incentivo de los polímeros haría mucho más atractiva la inversión en sus nuevas áreas de la provincia, aunque para el Estado provincial el aumento de la producción debería ser más que considerable y como mínimo tendría que duplicarse para equilibrar la pérdida de regalías que dejaría la quita.
Producción chubutense en baja
Lo cierto es que es que hasta septiembre la producción petrolera chubutense decreció un 6,8% acumulado y dejó un saldo negativo de 2.535.211 barriles de crudo menos que en el 2023.
La producción del mes pasado se ubicó en los 3.852.228 barriles frente a los 4.085.291 barriles del mismo mes del año pasado, reflejando una merma del 5,7% interanual que se tradujo en 233.063 barriles de diferencia en todos los yacimientos.
A pesar de todos los beneficios otorgados Tecpetrol fue la compañía que más decreció la producción en nueve meses con una retracción del 18,9% (-324.900 barriles); mientras que por detrás se ubicaron CAPSA con un 10,8% menos (-345.285 barriles); YPF con el 10,7% de caída (-1.077.790 barriles); CAPEX con el 6,7% de retroceso (-113.461 barriles) y PAE con un 3,1% de merma (-627.169 barriles).
Es imperioso para la provincia revertir este panorama de decrecimiento de la producción petrolera porque de lo contrario ingresará aún más en un proceso de cuello de botella donde se contraerán las regalías petroleras y se asfixiarán las cuentas públicas por los vencimientos de deuda en dólares garantizados con regalías.
Además, porque los yacimientos chubutenses necesitan retomar un ritmo productivo alcista para mantener y aumentar las fuentes de trabajo -con su consiguiente impacto social en el esquema económico de Comodoro y todo el Chubut- en medio del éxodo que se profundiza hacia Vaca Muerta.
Finalmente, la semana que se inicia marcará un punto de inflexión en la salida de YPF de Chubut con la reversión del área El Trébol-Escalante para ser reconcesionada a la empresa PECOM. La petrolera del Grupo Pérez Companc desembarcará en territorio chubutense para explotar dicha área, apostando a reconvertirse en una operadora del sector hidrocarburífero nacional y volcando sus principales esfuerzos a conseguir aumentar la producción de los yacimientos a partir de la explotación terciaria con polímeros. El desafío para esta operación de áreas maduras es importante porque la provincia sigue decreciendo en sus ritmos de producción de crudo Escalante y en paralelo se achican las regalías que ingresan a las arcas estatales. La perspectiva es incierta en cuanto tiempo se verán los primeros resultados en el terreno de la producción y cómo impactará en materia laboral. Tampoco se conocen aún detalles sobre la real dimensión y la remediación del pasivo ambiental que dejará la YPF tras más de 90 años de explotación petrolera.
Largos meses transcurrieron desde la actual conducción de YPF, a cargo de Horacio Marín, decidió abandonar la mayoría de los yacimientos que contrala en Chubut para focalizarse casi con exclusividad en los hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta.
Tras un proceso tedioso, bastante confidencial y con poca información oficial sobre los valores y las condiciones de la venta, el lunes YPF terminará de oficializar el traspaso del área de El Trébol-Escalante que será operada por la compañía PECOM, perteneciente al Grupo Pérez Companc.
Esta será la primera área que YPF transfiera a otra compañía en el marco del Plan Andes de desinversión en diferentes zonas del país, aunque todavía le queda bastante camino por recorrer para desprenderse de las 55 áreas que tiene en carpeta -particularmente las de Santa Cruz- y para ello pondría en marcha el Plan Andes 2 que buscará que en el 2025 están todas las áreas transferidas.
Esta previsto que al traspaso asistan el gobernador Ignacio Torres, el CEO de YPF (Horacio Marín), referentes sindicales y autoridades de la provincia; para que luego se concrete el empoderamiento de PECOM como concesionaria de los yacimientos involucrados y que fueran operados por la petrolera estatal desde principios de la década de 1930.
YPF tiene ahora entre ceja y ceja explotar Vaca Muerta y busca concretar la quimera de convertir al país en uno de los principales jugadores de la exportación de gas natural licuado y crudo no convencional desde la formación neuquina. Para lograrlo se desprende de la casi totalidad de las áreas maduras que le dieron origen tras su fundación en junio de 1922.
Ver: ¿Otra estafa para reprivatizar? YPF se va de Chubut y Santa Cruz bajando las reservas
Con una lógica bien de mercado y con las prioridades puestas en Vaca Muerta para generar dólares que ingresen al país, YPF se aleja en primera instancia de del área de El Trébol-Escalante; pero se supone en poco tiempo más hará lo mismo con la de Campamento Central-Cañadón Perdido que incluye donde se produjo el descubrimiento del petróleo en 1907.
Por ahora la entrega de la segunda concesión, que se prevé que también irá a parar a manos de PECOM, se encuentra demorada porque allí comparte la propiedad de la misma en 50% con la petrolera chilena Enap Sipetrol; quien se encuentra de salida de la Argentina, pero que aún no terminó de dar el visto bueno definitivo para el traspaso propuesto por YPF.
La petrolera con mayoría accionaria estatal se va casi completamente de Chubut, aunque por ahora seguirá manejando la concesión de Manantiales Behr en el territorio provincial; pero su salida deja un enorme pasivo ambiental de casi un siglo y resultados muy malos para la provincia en cuanto a niveles de producción, reservas e inversiones.
¿Qué deja YPF en Chubut?
En lo que respecta al área de El Trébol-Escalante el resultado productivo que deja YPF en los primeros nueve meses del año es muy malo. Este año se extrajeron 1.774.313 barriles de crudo que resultaron ser un 10,9% menores a los 1.992.423 barriles del mismo período del año pasado; reflejando una merma interanual de 218.110 barriles.
En cuanto al área de Campamente Central-Cañadón Perdido los resultados interanuales son aún peores. En los primeros nueve meses YPF tuvo una producción de 762.029 barriles que fueron un 12,6% más acotados que los 872.055 barriles del mismo período del 2023; indicando una contracción de 110.026 barriles.
Si la comparación se extiende con los primeros nueve meses del 2019 -año anterior a la pandemia-, en El Trébol-Escalante el achicamiento de la producción fue del 29,1% (-727.356 barriles) y del 46,7% en Campamento Central-Cañadón Perdido (-667.029 barriles).
Respecto del 2012, cuando YPF comenzó a volcar sus inversiones en Vaca Muerta, el retroceso en las dos áreas en cuestión fue del 20,6% (-461.491 barriles) y del 43,3% (-582.171 barriles) respectivamente.
En lo que respecta a las inversiones para este año YPF comprometió tan sólo 28,8 millones de dólares en El Trébol-Escalante y otros 33,3 millones en Campamento Central-Cañadón Perdido; mientras que el año pasado concretó inversiones por 73,5 y 30,7 millones de dólares respectivamente. La caída de las inversiones fue del 38,6% interanual.
Los números de YPF son indudablemente muy malos para la provincia y revertirlos será uno de los desafíos centrales para el Estado provincial como poder concedente y para PECOM como la nueva concesionaria; tanto para aumentar los niveles productivos como para incrementar los puestos de trabajo en dichos yacimientos.
Junto a estos guarismos de la petrolera que conduce Marín -ex CEO de Tecpetrol perteneciente al Grupo Techint- se deben adosar los pasivos ambientales que ronda un siglo de explotación petrolera en Chubut, los que por ahora no se han dimensionado públicamente ni tampoco se ha conocido el plan de remediación que se debió acordar con la compañía que abandona la concesión de las áreas en cuestión.
Ver: Todo planeado: YPF desplomó un 40% su inversión en 2024 y abandona las áreas maduras de Chubut
PECOM se la juega a ser operadora y la explotación terciaria
PECOM es una empresa del Grupo Pérez Companc que fue fundado en 1946. Jorge y Carlos Pérez Companc dan vida a la naviera del mismo nombre y en 1958 ponen en marcha la petrolera del holding empresario que se dedicaba a la perforación y terminación de pozos petrolíferos.
Su gran impulsor fue el fallecido Gregorio "Goyo" Pérez Companc, que según Luis Majul -en el libro "Los dueños de la Argentina"- fue adoptado por la francesa Margarita Companc de Pérez Acuña y por Ramón Pérez Acuña, quienes le dieron su apellido.
La revista Forbes posicionó a "Goyo" Pérez Companc como la tercera persona más rica del país, con una fortuna que ascendía a los 3.900 millones de dólares hasta el 2024 y que ocupaba el puesto 809 de los millonarios del mundo.
En el año 2015 nació PECOM luego que el grupo adquiriera los activos de la empresa Skanska y en el 2018 compró a la empresa de servicios petroleros Bolland para expandir sus actividades a Bolivia, Brasil y Colombia.
El CEO al mando de PECOM, Gustavo Astie, indicó sobre el desembarco en Chubut que buscarán convertir a la compañía en una "operadora", donde debería consolidarse en el rubro del Upstream.
"El mandato que tengo es que PECOM vuelva a ser lo que fue. Así que tendré que ofrecer una compañía muy grande, vamos a ver hasta dónde podemos llegar. Pero PECOM hoy tiene presencia en Brasil y en Argentina, y creo que hay muchas oportunidades en ambos países", relató.
"La fase 2 está todo ocurriendo al mismo tiempo: es la transformación a una operadora, que es el mandato que tengo del accionista, y crecer en el rubro del oil & gas", remarcó en una entrevista realizada por el portal especializado Mejor Energía.
"Si todo sale bien, lo estamos completando la semana que viene, haciéndonos cargo del primer yacimiento en la provincia de Chubut: El Trébol-Escalante", añadió entorno de la firma que se concretará con el inicio de la semana.
El directivo sostuvo que "el concepto de campos maduros es un poco relativo porque hay yacimientos en la Cuenca del Golfo que tienen determinadas condiciones de petróleo donde el factor de recobro se puede duplicar".
La explotación terciaria, utilizando polímeros y agua, será una de las prioridades para hacer funcionar los campos maduros de Chubut. "Yo creo que, insisto, con determinadas condiciones de petróleo, de presión, de temperatura y de reservorio, la terciaria es un mecanismo de recuperación muy interesante. Vimos resultados Manantiales Behr, de YPF, que es una cosa espectacular", sintetizó.
Incentivos para los polímeros
Preparando el terreno para el desembarco de PECOM, el gobernador Ignacio Torres anunció hace escasas semanas atrás que había conseguido que el Gobierno nacional flexibilice las condiciones y los cánones para la importación de los polímeros que son una pieza clave para la extracción terciaria en los yacimientos de la provincia.
Con el Decreto 908/2024, publicado en el Boletín Oficial del 16 de octubre, Nación eliminó los aranceles para la importación de polímeros, lo que beneficiará a PECOM y las demás petroleras que se adentren en la extracción de crudo bajo la técnica terciaria.
Fuentes especializadas aseguraron que en la provincia se demandan alrededor de 60 toneladas por día de polímeros para hacer brotar, combinadas con agua y calor, el viscosos crudo Escalante de las áreas maduras.
La quita del arancel que se ubicaba en el 14% para la importación, junto a la baja del impuesto PAIS para la importación de bienes y fletes que descendió del 17,5 al 7,5%, posibilitaría reducir marcadamente los costos de producción y de esa manera se maximizaría la rentabilidad de las perforaciones en los yacimientos vinculados a la explotación terciaria.
En Chubut alrededor del 12% de toda la producción petrolera esta traccionada por la terciaria y gracias a ese proceso CAPSA consiguió desde el 2007 -primera experiencia terciaria en el país- evitar que se desplomen aún más los ritmos de producción, mientras que YPF los aplicó de manera consistente desde el 2019 en Manantiales Behr y consiguió muy buenos resultados.
Si bien en el 2024 tanto CAPSA como YPF mostraron caídas de producción del 11,6 y del 10% respectivamente a lo largo de los primeros nueve meses del año; respecto del 2019 YPF consiguió aumentar los niveles extractivos en Manantiales Behr en un 17,5%, pero CAPSO decreció un 19,4% en Diadema. Entorno de los ritmos productivos del 2012, YPF obtuvo una mejoría del 25% y CAPSA un decrecimiento del 7,9%.
¿Quita de regalías?
El otro aliciente que podría entrar a jugar un papel importante para PECOM en Chubut es el régimen de disminución de regalías petroleras que instrumentó el gobernador Mariano Arcioni en el 2021 para la producción incremental en los yacimientos maduros.
El Decreto 278/2021 -firmado en abril de ese mismo año- puso en marcha en la provincia un esquema de reducción del pago de regalías petroleras de hasta el 6% para achicarlas a la mitad en el marco del Programa de promoción para la industria hidrocarburífera.
Los resultados no fueron auspiciosos a que la producción petrolera en la provincia siguió decreciendo y particularmente en el caso de Tecpetrol, con la que Arcioni instrumentó en diciembre del 2023 (Decreto 1068/2022) un programa especial para fomentar la extracción de crudo en los yacimientos La Tapera y Puesto Quiroga, posibilitándole a la compañía pagar solamente el 6% de regalías por diez años en los pozos perforados hasta julio del 2027; aunque hasta ahora no se lograron los objetivos incrementales propuestos.
No está claro si la explotación terciaria que encare PECOM podrá estar alcanzada o no por el primer decreto de Arcioni del año 2021, ya que si así fuera la petrolera del Grupo Pérez Companc podría verse beneficiada con el pago de la mitad de las regalías petroleras a cambio de aumentar los ritmos productivos y la generación de puestos de trabajo.
Para que eso suceda, Torres debería modificar el decreto de Arcioni porque allí se establecía que las operadoras podían ingresar sus proyectos al Programa de promoción para la industria hidrocarburífera hasta el 30 de septiembre del 2021; aunque el propio ex gobernador firmó pasado ese plazo el acuerdo con Tecpetrol donde le bajó las regalías a la mitad en La Tapera y Puesto Quiroga por diez años.
Allí quizás vaya a encontrarse un nuevo beneficio para PECOM que sumado al incentivo de los polímeros haría mucho más atractiva la inversión en sus nuevas áreas de la provincia, aunque para el Estado provincial el aumento de la producción debería ser más que considerable y como mínimo tendría que duplicarse para equilibrar la pérdida de regalías que dejaría la quita.
Producción chubutense en baja
Lo cierto es que es que hasta septiembre la producción petrolera chubutense decreció un 6,8% acumulado y dejó un saldo negativo de 2.535.211 barriles de crudo menos que en el 2023.
La producción del mes pasado se ubicó en los 3.852.228 barriles frente a los 4.085.291 barriles del mismo mes del año pasado, reflejando una merma del 5,7% interanual que se tradujo en 233.063 barriles de diferencia en todos los yacimientos.
A pesar de todos los beneficios otorgados Tecpetrol fue la compañía que más decreció la producción en nueve meses con una retracción del 18,9% (-324.900 barriles); mientras que por detrás se ubicaron CAPSA con un 10,8% menos (-345.285 barriles); YPF con el 10,7% de caída (-1.077.790 barriles); CAPEX con el 6,7% de retroceso (-113.461 barriles) y PAE con un 3,1% de merma (-627.169 barriles).
Es imperioso para la provincia revertir este panorama de decrecimiento de la producción petrolera porque de lo contrario ingresará aún más en un proceso de cuello de botella donde se contraerán las regalías petroleras y se asfixiarán las cuentas públicas por los vencimientos de deuda en dólares garantizados con regalías.
Además, porque los yacimientos chubutenses necesitan retomar un ritmo productivo alcista para mantener y aumentar las fuentes de trabajo -con su consiguiente impacto social en el esquema económico de Comodoro y todo el Chubut- en medio del éxodo que se profundiza hacia Vaca Muerta.