Escenarios posibles e influencias notorias que habrá en la elección chubutense de 2025 La eventual fusión del partido de Mauricio Macri con los libertarios de Javier Milei podría influir en el armado de listas de todo el país. En Chubut, Nacho Torres intentará mantener la independencia y consolidar el espacio que viene diseñando desde que fue electo gobernador. Mientras, en el peronismo no aparece nada nuevo bajo el sol.
La dinámica que adoptaron los acontecimientos durante la última parte del segundo trimestre del año permiten vislumbrar que a pesar de todo lo negativo que pueda achacársele a la gestión de los hermanos Milei y Santiago Caputo, el gobierno nacional parece consolidarse y haber despejado los nubarrones de una eventual salida anticipada, razón por la cual todo indica que en 2025 habrá elecciones solo para elegir legisladores nacionales. Si será con PASO -o no- está por verse.
Por eso en Chubut ya empezaron a analizarse nombres y eventuales alianzas, a la par que se confirma que los dos partidos históricos que se alternaron el poder desde 1983 ya no volverán a competir con sus sellos clásicos. Ni la UCR, ni el PJ pueden dar esa ventaja. Atilio Viglione, Carlos Maestro y Mario Das Neves son el pasado.
En esta oportunidad, deberán renovarse solo dos bancas en la Cámara de Diputados; las de María Eugenia Alianiello (Unión por la Patria), quien supo fijar domicilio en Puerto Madryn; y la de la abogada comodorense Ana Clara Romero, la macrista más notoria de la provincia y que ya avisó que se anota de nuevo, pese a que el año pasado coqueteó con volver a ser concejal para competir por tercera vez por el sitio que hoy ocupa Othar Macharashvili, con quien perdió en 2023.
SIEMPRE LISTOS PARA CUANDO TOQUE VOTAR
En la semana que pasó se ratificó que -al menos este año- el PRO no se fusionará con La Libertad Avanza, más allá de que Mauricio Macri se muestre dispuesto a conformar listas comunes en los distritos que ello sea posible. En realidad, al ingeniero de la reposera le importa más acordar con Javier Milei que le dejen la quinta de CABA y le arreglen algunos entuertos financiero-judiciales, como el del Correo. El resto es para los que ingresaron a la política para hacerla en serio.
Uno de estos últimos es el gobernador de Chubut. Ignacio Torres piensa en las elecciones del año que viene desde que derrotó a Juan Pablo Luque el 30 de julio de 2023. De allí que haya disimulado la vigencia del PRO en la provincia todo lo que pudo, a la par que daba aire a Despierta Chubut, la fuerza que conforman casi todos los que hoy son parte de su gobierno que incluye a peronistas de diversas corrientes; radicales clásicos y libre pensadores que supieron seguir a Martín Buzzi, Das Neves y Mariano Arcioni y que gobiernan localidades como Camarones, Río Mayo, Río Senguer o Corcovado.
A ellos se les sumaron en los últimos tiempos los mellizos Ricardo y Gustavo Sastre, quienes volvieron de Miami más "ganadores" que nunca tras presenciar la nueva consagración de la scaloneta en el Hard Rock Stadium.
Desde el valle, justamente, intentan instalar el nombre de alguno de los hermanos para ir como cabeza de lista en representación del oficialismo que llegó al poder con ellos del lado de Luque (Ricardo Sastre fue su candidato a vice).
Por ahora Torres no da señales y parece alentar a todos y a todas a que se sumen al juego. El tendrá la última palabra, más allá de que pueda escuchar a algún prominente de su partido sugerirle tal o cual nombre.
En este contexto, Ana Romero no quiere que se olviden de ella ("espero que la gente y el espacio lo reconozcan", ha dicho sobre su actuación) y a tono con la nueva canción macrista ya no sobreactúa sus elogios a las políticas de Milei, aunque no llega a cuestionarlas como quedó en evidencia en la última sesión del Concejo Deliberante de Comodoro Rivadavia, cuando sus cinco legisladores se opusieron a pedirle al gobernador Torres que interceda ante Nación por los subsidios que se van perdiendo y cuyas consecuencias padecen aquellos que, por ejemplo, encienden una llave de luz o viajan en transporte público. La mayoría, digamos. Los que inclinan elecciones. Esos que no pueden seguir esperando por un mañana venturoso cuando transitan por un ahora de pesadillas.
SIN MILEI EN LA BOLETA FUE OTRA COSA
Salvo en 2005 y en 2013, cuando el peronismo dasnevista se quedó con ambas bancas en disputa, la historia electoral de Chubut en las elecciones de medio término indica que los dos lugares se reparten entre las fuerzas más votadas. El último indicador al respecto -2021- así lo confirma: Juntos por el Cambio y Unión por la Patria le sacaron amplia diferencia al resto de competidores, entre ellos al Partido Independiente de Chubut (PICh), que postulaba en primer lugar a César Hernán Treffinger, que ese año quiso ser senador y lo dejaron en el camino Torres, Edith Terenzi y Carlos Linares. Sin embargo, dos años más tarde el financista que no se deja ver en público en su provincia llegó al Congreso como diputado nacional, pero esta vez en la misma boleta que Milei.
Sin el abrigo del autopercibido "topo del Estado" es otra cosa, como quedó demostrado en todo el país en la contienda electoral más inmediata. Por eso es muy difícil que aunque ahora exista como partido, La Libertad Avanza pueda terciar el año que viene. Hoy por hoy, hasta es más factible que los bendecidos por Torres se queden con ambos lugares, máxime si se considera que en vez de multiplicarse a partir de la consagración nacional, los libertarios locales se dividieron no solo en su representación parlamentaria provincial, sino también a la hora de definir quién se quedaba con el sello a la hora de oficializar lista: Treffinger tuvo su foto con Karina Milei, mientras Diego Alejandro Brandán lo denostaba mediáticamente. Este último, además, es subsecretario de Pesca de la provincia que gobierna Nacho Torres.
Pero en este ajedrez, además, hay que mantener alta la guardia porque, como dijo la propia diputada Romero, "es todo tan dinámico que hay que ser muy prudentes en los posicionamientos y no adelantarse. Hay muchas cosas que tienen que decantar. Las reglas de juego electorales cambian mucho el escenario y La Libertad Avanza quiere eliminar las PASO".
Puede que esto último sea mucho más que un detalle si en la previa a los cierres de listas, Macri entiende que lo mejor para la supervivencia del PRO (es decir la suya) es fusionarse de una vez, como le pide Milei ahora. Y atenerse a las consecuencias, claro. En este caso, ¿qué hará Torres? ¿Saludo uno, saludo dos? ¿O mantendrá toda la independencia que pueda del tablero nacional?
EN EL PERONISMO AHORA TODO CUESTA EL DOBLE
Mientras tanto, el peronismo debe definir un momento bisagra en su versión chubutense. No aparece el conductor caído del cielo y los que pueden serlo tienen otras prioridades, como gobernar sus ciudades en un contexto de malaria universal y con recursos que no abundan. Como primera ventanilla de atención a los sufridos, los intendentes deben resolver temas cotidianos que tienen que ver con el costo de vida; la desocupación; la caída en la recaudación porque ya no hay subsidios y porque la recesión comercial lleva a tener contemplaciones con los que venían sosteniendo sus actividades como podían hasta el año pasado.
Además, esta vez sí que hace falta un programa de acción para ser nuevamente opción y no mera continuidad de aquello que defraudó hace no mucho. Los conocidos de siempre lucen desorientados y los que hablan públicamente no aportan mucho más. Para acceder a una banca como diputado hará falta un plus esta vez. Ya pasó la era del dedo mágico y la foto reveladora.
La eventual fusión del partido de Mauricio Macri con los libertarios de Javier Milei podría influir en el armado de listas de todo el país. En Chubut, Nacho Torres intentará mantener la independencia y consolidar el espacio que viene diseñando desde que fue electo gobernador. Mientras, en el peronismo no aparece nada nuevo bajo el sol.
La dinámica que adoptaron los acontecimientos durante la última parte del segundo trimestre del año permiten vislumbrar que a pesar de todo lo negativo que pueda achacársele a la gestión de los hermanos Milei y Santiago Caputo, el gobierno nacional parece consolidarse y haber despejado los nubarrones de una eventual salida anticipada, razón por la cual todo indica que en 2025 habrá elecciones solo para elegir legisladores nacionales. Si será con PASO -o no- está por verse.
Por eso en Chubut ya empezaron a analizarse nombres y eventuales alianzas, a la par que se confirma que los dos partidos históricos que se alternaron el poder desde 1983 ya no volverán a competir con sus sellos clásicos. Ni la UCR, ni el PJ pueden dar esa ventaja. Atilio Viglione, Carlos Maestro y Mario Das Neves son el pasado.
En esta oportunidad, deberán renovarse solo dos bancas en la Cámara de Diputados; las de María Eugenia Alianiello (Unión por la Patria), quien supo fijar domicilio en Puerto Madryn; y la de la abogada comodorense Ana Clara Romero, la macrista más notoria de la provincia y que ya avisó que se anota de nuevo, pese a que el año pasado coqueteó con volver a ser concejal para competir por tercera vez por el sitio que hoy ocupa Othar Macharashvili, con quien perdió en 2023.
SIEMPRE LISTOS PARA CUANDO TOQUE VOTAR
En la semana que pasó se ratificó que -al menos este año- el PRO no se fusionará con La Libertad Avanza, más allá de que Mauricio Macri se muestre dispuesto a conformar listas comunes en los distritos que ello sea posible. En realidad, al ingeniero de la reposera le importa más acordar con Javier Milei que le dejen la quinta de CABA y le arreglen algunos entuertos financiero-judiciales, como el del Correo. El resto es para los que ingresaron a la política para hacerla en serio.
Uno de estos últimos es el gobernador de Chubut. Ignacio Torres piensa en las elecciones del año que viene desde que derrotó a Juan Pablo Luque el 30 de julio de 2023. De allí que haya disimulado la vigencia del PRO en la provincia todo lo que pudo, a la par que daba aire a Despierta Chubut, la fuerza que conforman casi todos los que hoy son parte de su gobierno que incluye a peronistas de diversas corrientes; radicales clásicos y libre pensadores que supieron seguir a Martín Buzzi, Das Neves y Mariano Arcioni y que gobiernan localidades como Camarones, Río Mayo, Río Senguer o Corcovado.
A ellos se les sumaron en los últimos tiempos los mellizos Ricardo y Gustavo Sastre, quienes volvieron de Miami más "ganadores" que nunca tras presenciar la nueva consagración de la scaloneta en el Hard Rock Stadium.
Desde el valle, justamente, intentan instalar el nombre de alguno de los hermanos para ir como cabeza de lista en representación del oficialismo que llegó al poder con ellos del lado de Luque (Ricardo Sastre fue su candidato a vice).
Por ahora Torres no da señales y parece alentar a todos y a todas a que se sumen al juego. El tendrá la última palabra, más allá de que pueda escuchar a algún prominente de su partido sugerirle tal o cual nombre.
En este contexto, Ana Romero no quiere que se olviden de ella ("espero que la gente y el espacio lo reconozcan", ha dicho sobre su actuación) y a tono con la nueva canción macrista ya no sobreactúa sus elogios a las políticas de Milei, aunque no llega a cuestionarlas como quedó en evidencia en la última sesión del Concejo Deliberante de Comodoro Rivadavia, cuando sus cinco legisladores se opusieron a pedirle al gobernador Torres que interceda ante Nación por los subsidios que se van perdiendo y cuyas consecuencias padecen aquellos que, por ejemplo, encienden una llave de luz o viajan en transporte público. La mayoría, digamos. Los que inclinan elecciones. Esos que no pueden seguir esperando por un mañana venturoso cuando transitan por un ahora de pesadillas.
SIN MILEI EN LA BOLETA FUE OTRA COSA
Salvo en 2005 y en 2013, cuando el peronismo dasnevista se quedó con ambas bancas en disputa, la historia electoral de Chubut en las elecciones de medio término indica que los dos lugares se reparten entre las fuerzas más votadas. El último indicador al respecto -2021- así lo confirma: Juntos por el Cambio y Unión por la Patria le sacaron amplia diferencia al resto de competidores, entre ellos al Partido Independiente de Chubut (PICh), que postulaba en primer lugar a César Hernán Treffinger, que ese año quiso ser senador y lo dejaron en el camino Torres, Edith Terenzi y Carlos Linares. Sin embargo, dos años más tarde el financista que no se deja ver en público en su provincia llegó al Congreso como diputado nacional, pero esta vez en la misma boleta que Milei.
Sin el abrigo del autopercibido "topo del Estado" es otra cosa, como quedó demostrado en todo el país en la contienda electoral más inmediata. Por eso es muy difícil que aunque ahora exista como partido, La Libertad Avanza pueda terciar el año que viene. Hoy por hoy, hasta es más factible que los bendecidos por Torres se queden con ambos lugares, máxime si se considera que en vez de multiplicarse a partir de la consagración nacional, los libertarios locales se dividieron no solo en su representación parlamentaria provincial, sino también a la hora de definir quién se quedaba con el sello a la hora de oficializar lista: Treffinger tuvo su foto con Karina Milei, mientras Diego Alejandro Brandán lo denostaba mediáticamente. Este último, además, es subsecretario de Pesca de la provincia que gobierna Nacho Torres.
Pero en este ajedrez, además, hay que mantener alta la guardia porque, como dijo la propia diputada Romero, "es todo tan dinámico que hay que ser muy prudentes en los posicionamientos y no adelantarse. Hay muchas cosas que tienen que decantar. Las reglas de juego electorales cambian mucho el escenario y La Libertad Avanza quiere eliminar las PASO".
Puede que esto último sea mucho más que un detalle si en la previa a los cierres de listas, Macri entiende que lo mejor para la supervivencia del PRO (es decir la suya) es fusionarse de una vez, como le pide Milei ahora. Y atenerse a las consecuencias, claro. En este caso, ¿qué hará Torres? ¿Saludo uno, saludo dos? ¿O mantendrá toda la independencia que pueda del tablero nacional?
EN EL PERONISMO AHORA TODO CUESTA EL DOBLE
Mientras tanto, el peronismo debe definir un momento bisagra en su versión chubutense. No aparece el conductor caído del cielo y los que pueden serlo tienen otras prioridades, como gobernar sus ciudades en un contexto de malaria universal y con recursos que no abundan. Como primera ventanilla de atención a los sufridos, los intendentes deben resolver temas cotidianos que tienen que ver con el costo de vida; la desocupación; la caída en la recaudación porque ya no hay subsidios y porque la recesión comercial lleva a tener contemplaciones con los que venían sosteniendo sus actividades como podían hasta el año pasado.
Además, esta vez sí que hace falta un programa de acción para ser nuevamente opción y no mera continuidad de aquello que defraudó hace no mucho. Los conocidos de siempre lucen desorientados y los que hablan públicamente no aportan mucho más. Para acceder a una banca como diputado hará falta un plus esta vez. Ya pasó la era del dedo mágico y la foto reveladora.
