Los "autos voladores" ya llegaron a América Latina y Brasil dio el puntapié inicialSPUTNIK
La decisión de Embraer de instalar una fábrica de eVTOL, vehículos voladores eléctricos, pondrá a Brasil en la primera línea de una industria que "está más cerca de lo que creemos", dijo a Sputnik el consultor aeronáutico Daniel Silvera. El experto explicó cómo podrían funcionar estos vehículos, que ya se imaginan tanto en México como en Argentina.
Con la construcción de una fábrica en el estado de Sao Paulo, Brasil ha decidido dar el "puntapié inicial" de la construcción latinoamericana de eVTOLs, como se conoce a un nuevo tipo de aeronaves creadas para poder despegar y aterrizar de forma vertical (de hecho, su nombre es la sigla en inglés para despegue y aterrizaje vertical eléctrico).
En efecto, la compañía brasileña Embraer -la tercera empresa del mundo en fabricación de aeronaves- comunicó su plan para instalar una fábrica de este tipo de vehículos en la ciudad de Taubaté, en el estado de Sao Paulo, a través de su subsidiaria Eve Air Mobility, que se dedicará específicamente al desarrollo de estos vehículos voladores.
En un diálogo con Sputnik, el consultor aeronáutico Daniel Silvera valoró que con el anuncio el gigante suramericano da un paso clave dentro de una industria que está en pleno desarrollo y que promete ser "disruptiva en el mercado aeronáutico", al punto de modificar la forma en que las personas se desplazan a nivel regional y hasta dentro de las ciudades.
Es que, por el momento, la forma más fácil de comprender qué es un eVTOL es compararlo con los autos voladores de las películas de ciencia ficción, algo de lo que, según el consultor uruguayo, la humanidad no está tan lejos, ya que ya se planea que este tipo de vehículos voladores hagan su presentación estelar ante el gran público durante los Juegos Olímpicos de París 2024.
"El eVTOL en el futuro va a modificar la aviación como la conocemos porque trae un montón de componentes nuevos, permite operar con inteligencia artificial y otros ingredientes que van a transformar la aviación", sostuvo el experto en aeronáutica.
Silvera explicó que este tipo de vehículos pueden variar en su fisonomía -dependiendo del sitio en el que se ubican las hélices, por ejemplo- pero se caracterizan por despegar y aterrizar de forma vertical, de manera similar a la que lo hacen los helicópteros en la actualidad. Otras de sus características esenciales es que se alimentan con energía eléctrica, por lo que no emiten dióxido de carbono ni contaminación auditiva.
¿Para qué servirán los eVTOLs?
El consultor detalló que este tipo de vehículos surgen pensando en tres tipos de trayectos, los intraciudades -para viajes en un radio de 50 kilómetros-, los interlíneas -de entre 50 y 150 kilómetros- y viajes interciudades -previstos para trayectos de unos 300 kilómetros-.
De acuerdo al experto, los tramos intraciudades, también catalogados como urban air movility (movilidad urbana aérea), son los que prometen un mayor desarrollo en el corto plazo, permitiendo ofrecer incluso servicios de transporte privado al estilo de taxis o traslados como los de la empresa Uber en diferentes ciudades del mundo. De hecho, la firma estadounidense explora desde 2019 esta posibilidad en Japón y Europa, aunque sin lograr ponerlo en marcha por el momento.
Silvera explicó que este tipo de movilidad aérea urbana podría incluso modificar el negocio de los bienes raíces en las ciudades, ya que el tráfico de eVTOL requiere la instalación de redes de "vertipuertos" en las urbes. Muchos nuevos edificios comienzan a imaginarse ya con espacios de este tipo para habilitar el despegue y aterrizaje de estos vehículos, tanto para los propios habitantes como para servicios externos.
Este servicio, explicó Silvera, podría ser especialmente útil en ciudades como Sao Paulo, una metrópolis de más de 12 millones de habitantes que concentra el mayor tráfico de helicópteros del mundo. Desarrollar este tipo de vuelos intraciudad permitiría a los paulistas "reducir significativamente el tiempo de traslados y costos en comparación con los helicópteros", subrayó el consultor.
Aun así, los costos operativos de estos servicios todavía serán altos, por lo que en una primera etapa serán usados casi exclusivamente por "pasajeros VIP" o con poder adquisitivo alto. De todos modos, Silvera confía en que los traslados con eVTOL "se irán democratizando" en la medida en que las empresas puedan reducir sus costos.
En ese proceso entraría en juego, pronosticó el experto, las regulaciones y apoyos que los países puedan establecer para este tipo de vehículos, que volarían a una altura aproximada de 300 metros y que en sus formatos estándar pueden trasladar a entre cuatro y seis pasajeros a velocidades de entre 120 y 280 kilómetros por hora.
Silvera consideró que esas características podrían asemejarse, al menos en una primera etapa, a las de los viajes en helicóptero, por lo que los sistemas podrían comenzar a operar con reglamentaciones aeronáuticas similares a las de estos vehículos, hasta tanto se establezcan normativas específicas.
Entre los desafíos que las normativas tendrán que resolver estará el control de estos vehículos, que según Silvera están preparados para, cumplida una primera etapa operada por pilotos a bordo, ser controlados por pilotos de forma remota o incluso volar de forma completamente autónoma gracias a inteligencia artificial.
"Hay que pensar si las personas se animarían a subirse a un eVTOL que vuela de forma autónoma", preguntó Silvera con relación a las dudas que este tipo de funcionamiento podría generar en los usuarios. Por eso, estimó que el desarrollo de los primeros vuelos de carga -sin pasajeros- podría servir para dar confianza a los futuros pasajeros.
Una nueva vida para los aeropuertos
El otro gran desafío será de infraestructura, ya que las ciudades deberán adaptarse para asegurar la carga de energía eléctrica para este tipo de vehículos. Esto se verá especialmente en los aeropuertos, que según Silvera ya son los primeros en prever el uso de eVTOL para trasladar pasajeros hacia otras instalaciones.
Silvera remarcó que parte de los cambios que los países deberán resolver es cómo abastecer a sus aeropuertos de las grandes cantidades de energía eléctrica que requieran para hacer funcionar los eVTOL. Es que, subrayó el consultor, el uso de estos vehículos en terminales aéreas es uno de los campos que promete desarrollarse primero, en forma de shuttles (vehículos para traslados).
El experto aseveró que "ya hay aeropuertos en América Latina que tienen previsto el uso de estas aeronaves".
En efecto, en 2022 la empresa mexicana Air Mobility, que distribuye los eVTOL diseñados por la empresa china Ehang, ya ofrece públicamente la posibilidad de que sus vehículos voladores sirvan para conectar el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con ciudades cercanas por precios mucho menores que los helicópteros y hasta con la posibilidad de reservar los viajes a través de una aplicación.
En el sur del continente, la Corporación América Sports -un conglomerado argentino que tiene la gestión de los aeropuertos de Argentina, Uruguay y algunos de Brasil- firmó un memorándum de entendimiento con la multinacional con sede en Londres Skyports Infrastructure para estudiar la posible instalación de vertipuertos en aeropuertos de Buenos Aires, Montevideo, Punta del Este y Brasilia.
Para Silvera, si bien los fabricantes de eVTOLs comienzan a multiplicarse, la instalación de una fábrica en Sao Paulo puede ser crucial para poner a Brasil entre los principales productores del mundo. "Creo que los dos fabricantes fuertes van a ser EEUU y Brasil, que van a ser los que tengan mayor fortaleza en la región", destacó.
SPUTNIK
La decisión de Embraer de instalar una fábrica de eVTOL, vehículos voladores eléctricos, pondrá a Brasil en la primera línea de una industria que "está más cerca de lo que creemos", dijo a Sputnik el consultor aeronáutico Daniel Silvera. El experto explicó cómo podrían funcionar estos vehículos, que ya se imaginan tanto en México como en Argentina.
Con la construcción de una fábrica en el estado de Sao Paulo, Brasil ha decidido dar el "puntapié inicial" de la construcción latinoamericana de eVTOLs, como se conoce a un nuevo tipo de aeronaves creadas para poder despegar y aterrizar de forma vertical (de hecho, su nombre es la sigla en inglés para despegue y aterrizaje vertical eléctrico).
En efecto, la compañía brasileña Embraer -la tercera empresa del mundo en fabricación de aeronaves- comunicó su plan para instalar una fábrica de este tipo de vehículos en la ciudad de Taubaté, en el estado de Sao Paulo, a través de su subsidiaria Eve Air Mobility, que se dedicará específicamente al desarrollo de estos vehículos voladores.
En un diálogo con Sputnik, el consultor aeronáutico Daniel Silvera valoró que con el anuncio el gigante suramericano da un paso clave dentro de una industria que está en pleno desarrollo y que promete ser "disruptiva en el mercado aeronáutico", al punto de modificar la forma en que las personas se desplazan a nivel regional y hasta dentro de las ciudades.
Es que, por el momento, la forma más fácil de comprender qué es un eVTOL es compararlo con los autos voladores de las películas de ciencia ficción, algo de lo que, según el consultor uruguayo, la humanidad no está tan lejos, ya que ya se planea que este tipo de vehículos voladores hagan su presentación estelar ante el gran público durante los Juegos Olímpicos de París 2024.
"El eVTOL en el futuro va a modificar la aviación como la conocemos porque trae un montón de componentes nuevos, permite operar con inteligencia artificial y otros ingredientes que van a transformar la aviación", sostuvo el experto en aeronáutica.
Silvera explicó que este tipo de vehículos pueden variar en su fisonomía -dependiendo del sitio en el que se ubican las hélices, por ejemplo- pero se caracterizan por despegar y aterrizar de forma vertical, de manera similar a la que lo hacen los helicópteros en la actualidad. Otras de sus características esenciales es que se alimentan con energía eléctrica, por lo que no emiten dióxido de carbono ni contaminación auditiva.
¿Para qué servirán los eVTOLs?
El consultor detalló que este tipo de vehículos surgen pensando en tres tipos de trayectos, los intraciudades -para viajes en un radio de 50 kilómetros-, los interlíneas -de entre 50 y 150 kilómetros- y viajes interciudades -previstos para trayectos de unos 300 kilómetros-.
De acuerdo al experto, los tramos intraciudades, también catalogados como urban air movility (movilidad urbana aérea), son los que prometen un mayor desarrollo en el corto plazo, permitiendo ofrecer incluso servicios de transporte privado al estilo de taxis o traslados como los de la empresa Uber en diferentes ciudades del mundo. De hecho, la firma estadounidense explora desde 2019 esta posibilidad en Japón y Europa, aunque sin lograr ponerlo en marcha por el momento.
Silvera explicó que este tipo de movilidad aérea urbana podría incluso modificar el negocio de los bienes raíces en las ciudades, ya que el tráfico de eVTOL requiere la instalación de redes de "vertipuertos" en las urbes. Muchos nuevos edificios comienzan a imaginarse ya con espacios de este tipo para habilitar el despegue y aterrizaje de estos vehículos, tanto para los propios habitantes como para servicios externos.
Este servicio, explicó Silvera, podría ser especialmente útil en ciudades como Sao Paulo, una metrópolis de más de 12 millones de habitantes que concentra el mayor tráfico de helicópteros del mundo. Desarrollar este tipo de vuelos intraciudad permitiría a los paulistas "reducir significativamente el tiempo de traslados y costos en comparación con los helicópteros", subrayó el consultor.
Aun así, los costos operativos de estos servicios todavía serán altos, por lo que en una primera etapa serán usados casi exclusivamente por "pasajeros VIP" o con poder adquisitivo alto. De todos modos, Silvera confía en que los traslados con eVTOL "se irán democratizando" en la medida en que las empresas puedan reducir sus costos.
En ese proceso entraría en juego, pronosticó el experto, las regulaciones y apoyos que los países puedan establecer para este tipo de vehículos, que volarían a una altura aproximada de 300 metros y que en sus formatos estándar pueden trasladar a entre cuatro y seis pasajeros a velocidades de entre 120 y 280 kilómetros por hora.
Silvera consideró que esas características podrían asemejarse, al menos en una primera etapa, a las de los viajes en helicóptero, por lo que los sistemas podrían comenzar a operar con reglamentaciones aeronáuticas similares a las de estos vehículos, hasta tanto se establezcan normativas específicas.
Entre los desafíos que las normativas tendrán que resolver estará el control de estos vehículos, que según Silvera están preparados para, cumplida una primera etapa operada por pilotos a bordo, ser controlados por pilotos de forma remota o incluso volar de forma completamente autónoma gracias a inteligencia artificial.
"Hay que pensar si las personas se animarían a subirse a un eVTOL que vuela de forma autónoma", preguntó Silvera con relación a las dudas que este tipo de funcionamiento podría generar en los usuarios. Por eso, estimó que el desarrollo de los primeros vuelos de carga -sin pasajeros- podría servir para dar confianza a los futuros pasajeros.
Una nueva vida para los aeropuertos
El otro gran desafío será de infraestructura, ya que las ciudades deberán adaptarse para asegurar la carga de energía eléctrica para este tipo de vehículos. Esto se verá especialmente en los aeropuertos, que según Silvera ya son los primeros en prever el uso de eVTOL para trasladar pasajeros hacia otras instalaciones.
Silvera remarcó que parte de los cambios que los países deberán resolver es cómo abastecer a sus aeropuertos de las grandes cantidades de energía eléctrica que requieran para hacer funcionar los eVTOL. Es que, subrayó el consultor, el uso de estos vehículos en terminales aéreas es uno de los campos que promete desarrollarse primero, en forma de shuttles (vehículos para traslados).
El experto aseveró que "ya hay aeropuertos en América Latina que tienen previsto el uso de estas aeronaves".
En efecto, en 2022 la empresa mexicana Air Mobility, que distribuye los eVTOL diseñados por la empresa china Ehang, ya ofrece públicamente la posibilidad de que sus vehículos voladores sirvan para conectar el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con ciudades cercanas por precios mucho menores que los helicópteros y hasta con la posibilidad de reservar los viajes a través de una aplicación.
En el sur del continente, la Corporación América Sports -un conglomerado argentino que tiene la gestión de los aeropuertos de Argentina, Uruguay y algunos de Brasil- firmó un memorándum de entendimiento con la multinacional con sede en Londres Skyports Infrastructure para estudiar la posible instalación de vertipuertos en aeropuertos de Buenos Aires, Montevideo, Punta del Este y Brasilia.
Para Silvera, si bien los fabricantes de eVTOLs comienzan a multiplicarse, la instalación de una fábrica en Sao Paulo puede ser crucial para poner a Brasil entre los principales productores del mundo. "Creo que los dos fabricantes fuertes van a ser EEUU y Brasil, que van a ser los que tengan mayor fortaleza en la región", destacó.