Poesía y revoluciónPor Gerardo Burton.
Cuando era todavía un joven de la clase alta nicaragüense, Ernesto Cardenal y su amigo José Coronel Urtecho, tradujeron a los poetas norteamericanos desde los aborígenes hasta los nacidos en la tercera década del siglo pasado. Ese libro es un homenaje a su maestro Ezra Pound.
En 1972, un libro de notas de viaje tomadas por un poeta irrumpió como un tornado caribeño en los hábitos de lectura del público argentino y acaso latinoamericano. Era un librito de 370 páginas, casi de bolsillo -mide 11 por 19 centímetros- y su autor era un nicaragüense cuyo poema más conocido era un epigrama de amor no correspondido que se vendía en posters:
Al perderte yo a ti
Tu y yo hemos perdido:
Yo por que tú eras
Lo que yo más amaba
Y tú por que yo era
El que te amaba más.
Pero de nosotros dos
Tú pierdes más que yo:
Porque yo podré amar a otros
Como te amaba a ti,
Pero a ti no te amarán
Como te amaba yo.
Parecía más un anuncio publicitario ingenioso que el poema de un monje trapense que había fundado una comunidad religiosa en una pequeña isla -Solentiname- del gran lago de Nicaragua y que se autodefinía como revolucionario. La tapa del libro en cuestión era de fondo negro, con la palabra CUBA en rojo, a todo lo ancho y en cuerpo mayor, la preposición EN muy pequeña y unas líneas blancas que, sobre el fondo negro, semejaban un mar calmo. El autor de ese relato de viajes murió hace unos días a los 95 años. Ernesto Cardenal tenía entonces casi cincuenta años y su poesía ya había atravesado varios ismos. Desde la imitación de los clásicos latinos (Marcial, Catulo) para construir esos "Epigramas" con que lamentaba o exageraba, no sin ironía, sus fracasos de amor al tiempo que relataba la lucha contra la dictadura somocista. En esos versos nada románticos, cuasi sarcásticos, las mujeres eran las compañeras de ruta con quienes buscaba la liberación aun lejana, pero también eran crueles en su desdén. Tiranas en su indiferencia con el poeta.
De estos cines, Claudia, de estas fiestas,
de estas carreras de caballos,
no quedará nada para la posteridad
sino los versos de Ernesto Cardenal para Claudia
(si acaso)
y el nombre de Claudia que yo puse en esos versos
y los de mis rivales, si es que yo decido rescatarlos
del olvido, y los incluyo también en mis versos
para ridiculizarlos.
Tú no vales siquiera un epigrama.
Si tú estás en Nueva York
en Nueva York no hay nadie más
y si no estás en Nueva York
en Nueva York no hay nadie.
Me contaron que estabas enamorada de otro
y entonces me fui a mi cuarto
y escribí este artículo contra el Gobierno
por el que estoy preso.
Si cuando fue la rebelión de abril
me hubieran matado con ellos
yo no te habría conocido:
y si ahora hubiera sido la rebelión de abril
me hubieran matado con ellos.
De "Epigramas":
Cuando era todavía un joven de la clase alta nicaragüense, Cardenal y su amigo, el también poeta José Coronel Urtecho, tradujeron la poesía norteamericana desde la de los aborígenes, conservada en museos o por tradición oral (sioux, apaches, apalaches, chippewa, navajos, cheyenes y otros) hasta la escrita por los nacidos en la tercera década del siglo pasado. El libro, "Antología de la poesía norteamericana", no sólo es un clásico en la industria editorial (lo publicó Aguilar de España en 1962) sino que además representa una suerte de homenaje al primer gran maestro que tuvo Cardenal: Ezra Pound. De Pound, dirá luego Cardenal, aprendió que en la poesía se pueden contraponer imágenes, dos cosas contrarias que, al estar juntas, producen una tercera imagen; que es necesario entrar directamente en los hechos como lo hace una cámara fotográfica, sin adjetivos ni palabras superfluas. En la poesía, según Pound, entra todo además del lirismo convencional: las estadísticas, los números, la astronomía, las ciencias, la historia, la crónica periodística, la publicidad. Del imaginismo de Pound, Cardenal, Coronel Urtecho y sus compañeros extrajeron el exteriorismo, cuyos rasgos principales son la intertextualidad, que incorpora también palabras de otras lenguas, muertas o vivas, la ausencia de retórica, el prosaísmo y el tono convencional. Cardenal, que siempre decía que Coronel Urtecho era su verdadero maestro, solía afirmar que la poesía actual no se entiende, no llega a la gente, porque los poetas hablan para sí mismos y no para el pueblo. Les interesa más cómo suena un poeta entre poetas que cómo se escucha en un estadio, dice, en un sindicato, en un teatro, en una manifestación. Este tema resulta crucial en su trayectoria poética, dado que de los epigramas del principio, que muestran la relación yo-tú enmarcada en la lucha política contra Somoza, Cardenal pasó a la búsqueda histórica en un doble rumbo: el de la historia de los pueblos aborígenes de la América entera, de donde nace su "Homenaje a los indios americanos", quizás el libro que más tributo rinde a Pound, y a la historia de la conquista del continente por españoles, británicos y otros europeos ("El estrecho dudoso"), las luchas por la independencia luego y contra el imperialismo norteamericano al final. "Oráculo sobre Managua" y "Canto nacional (para el Frente Sandinista de Liberación Nacional)" son los dos libros más imbricados en la lucha política previa a la revolución que triunfó en 1979 y de la cual fue funcionario.
-Tragátela- Me dijo el Coronel Somoza Debayle -¿No es
tu propia sangre? No te hará daño-
Empecé a declarar mentiras, la voz entrecortada, las taquígrafas
recogiéndolo en el papel con su lápiz veloz..."
Entre tortura y tortura él veía una película.
...
Entonces no sabíamos que los presos estaban con las fieras.
La pantera negra había sido regalo de Castillo Armas
lo que no era muy tranquilizador que digamos. Somoza
gordo lleno de condecoraciones como un árbol de Navidad.
Los seminaristas iban de paseo a Acahualinca a ver las huellas.
Sucedió que te metiste a la clandestinidad y moriste en la guerrilla urbana
Toda vida uneune y no divide(integra)
Por eso diste tu vida vos
en el quinto planeta de una estrella mediana de la Vía Láctea.
...
Por eso vos Leonel Rugama poeta de 20 años te metiste a la guerrilla urbana.
Ex-seminarista, marxista, decías en la cafetería La India que la revolución
es la comunión con la especie.
...
Una nueva sociedad un nuevo cielo y una nueva tierra
también la producción del tiempo libre
y con el desarrollo de la capacidad de producción
el desarrollo de la vida interiorun hombre nuevo y un nuevo canto
por eso moriste en la guerrilla urbanaun hombre nuevo que sueñe nuevos sueños.
Y en Cuba hay palabras desaparecidas como:
Bayú (burdel); Capataz; Criada; Chulo.
También Garito; Fletera (prostituta); Garrotero (prestamista)
Esto casi no es un poema
Quiero decir: hay palabras que en Cuba los jóvenes no conocen.
Desaparecieron los dinosaurios del Jurásico
La vida de cada uno más rica y más hermosa
La evolución es por saltos dijo Mao
la evolución es la revolución
la revolución no es ilusión
la oruga teje a su alrededor una nueva morada
de la que sale con alas de colores con las cuales vuela hacia el cielo
Vos Leonel Rugama acribillado y llevado a la morgue
manchado de tierra y sangre dijo "La Prensa"
fuiste la luz al final de un túnel. (Oráculo sobre Managua, fragmentos)
A lo largo de ese proceso inicial, a sus treinta años se convierte al catolicismo, decide ser sacerdote y a partir de ello su poesía incorpora un importante componente místico. Esto ocurre a partir, fundamentalmente, de su ingreso al monasterio trapense de Nuestra Señora de Gethsemaní en Kentucky, Estados Unidos, donde encuentra a su segundo gran maestro: Thomas Merton, que es designado su director espiritual. De este período son sus "Oración por Marilyn Monroe" y sus "Salmos", y la poesía religiosa posterior que tiene una dimensión cósmica, añadida y superpuesta a las características revolucionarias e históricas que ya tenía. El verso no sólo libre sino abierto, expansivo a la manera de Whitman y de Neruda, con esos golpes rítmicos que recuerdan el oleaje del mar, colaboran para sostener tanta información, tanto contenido. Como su antecesor y coetáneo Rubén Darío inventó el modernismo a partir del simbolismo francés, Cardenal fue el beatnik de América Latina, contemporánea su poesía a la de sus pares de Estados Unidos. Así, no compone sólo un poema ni una sinfonía ni una ópera. Su poesía incorpora todo, con un apetito voraz, y lo transforma en belleza, en liberación, en esperanza sólida, material.
Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido ni
asiste a sus mítines
ni se sienta a la mesa con los gánsters
ni con los Generales en el Consejo de Guerra
Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano
ni delata a su compañero de colegio
Bienaventurado el hombre que no lee los anuncios comerciales
ni escucha sus radios
ni cree en sus slogans
Será como un árbol plantado junto a una fuente. (Salmo 1)
Líbrame Señor
de la S.S. de la N.K.V.D. de la FBI de la G.N.
Líbrame de sus Consejos de Guerra
De la rabia de sus jueces y sus guardias
Tú eres quien juzga a las grandes potencias
Tú eres el juez que juzga a los Ministros de Justicia
y a las Cortes Supremas de Justicia
¡Defiéndeme Señor del proceso falso!
Defiende a los exiliados y los deportados
los acusados de espionaje y sabotaje
condenados a trabajos forzados
Las armas del Señor son más terribles
que las armas nucleares!
Los que purgan a otros serán también purgados
Pero yo te cantaré a ti porque eres justo
Te cantaré en mis salmos / en mis poemas (Salmo 7)
Quizás en ese encuentro con Merton su poesía haya dado una nueva torsión: de la historia (o de la crónica histórica de "Homenaje...", "El estrecho..." u "Hora 0"). Cardenal vuelve mística su poesía pero nunca intimista o individualista: la revolución lo lleva a la religión y la religión sostiene la revolución. Merton señala el camino de la contemplación, enseña que el universo es un organismo vivo de la misma estatura que la humanidad, y que la redención cristiana opera no sólo en la carne y el alma de la mujer y del hombre sino también, y sobre todo, en la materia. La materia tiene espíritu y marcha hacia su total liberación, parece decir Cardenal acaso inspirado por Teilhard de Chardin. En cada estrella, dice en algún poema, hay materia humana, y en cada humano, hay materia de la estrellas. La coherencia entre la práctica política, la historia, la poesía y la fe cristiana llevan casi naturalmente a Cardenal a esa convicción de una convergencia del mundo en el final de los tiempos. Sus poemas finales eluden el individualismo porque todo (otra vez Teilhard) se subordina a un mundo transparente, diáfano, que universaliza la historia a la manera del Evangelio de Juan: Cristo es el Alfa y el Omega, es el Logos del principio y el Cordero de los últimos tiempos, y hacia ese punto marcha el universo en su totalidad.
Explosión hace 20.000 millones de años.
Aún ha quedado un vago rumor de esa explosión,
ondas de radio venidas de las profundidades del espacio,
algo que se percibe en la televisión, dicen,
cuando está a todo volumen sin ningún canal.
Como mil millones de galaxias han visto los telescopios
en un área de mil millones de años luz.
Trenes en la noche alejándose de una estación.
El silbido es más agudo al acercarse
y es más grave cuando se va alejando.
Primero una infinita condensación de la materia.
Y del matrimonio de protones con neutrones
se produjo la vida.
¿Qué hay en una estrella? Nosotros mismos.
Todos los elementos de nuestro cuerpo y del planeta
estuvieron en las entrañas de una estrella.
Somos polvo de estrellas.
hace 15.000.000.000 de años éramos una masa
de hidrógeno flotando en el espacio, girando lentamente, danzando.
Y el gas se condensó más y más
cada vez con más y más masa
y la masa se hizo estrella y empezó a brillar.
Condensándose se hacían calientes y luminosas.
La gravitación producía energía térmica: luz y calor.
Como decir amor.
Nacían, crecían y morían las estrellas.
Y la galaxia fue tomando forma de flor
como hoy la vemos en la noche estrellada.
Nuestra carne y nuestros huesos vienen de otras estrellas
y aun tal vez de otras galaxias,
somos universales,
y después de la muerte contribuiremos a formar otras estrellas
y otras galaxias.
De las estrellas somos y volveremos a ellas.
Tren más agudo al acercarse
Y los objetos celestes más azules al acercarse
y más rojos si se alejan.
Por qué es negra la noche...
Es negra por la expansión del universo.
Si no, todo el cielo brillaría como el sol.
Y no habría ninguno para ver esa noche.
¿Y las galaxias hacia dónde van?
En expansión como el humo dispersado por el viento.
La segunda ley de la termodinámica:
Este constante fluir de la luz a las tinieblas.
Del amor al olvido.
Él tenía 20 años, ella 15 cumpliendo 16.
Iluminación en las calles y en el cielo. El cielo
el de Granada.
Fue el último adiós,
y fue cuando él le recitó a Neruda:
".... los versos más tristes esta noche".
"La noche está estrellada
y tiritan azules los astros a lo lejos."
Dos seres se separaron para siempre.
No hubo ningún testigo en aquel adiós.
Las dos direcciones cada vez más divergentes
como estrellas desplazándose hacia el rojo.
He pensado otra vez en vos, porque la noche está estrellada
y miro temblar los astros a lo lejos con su luz azulosa.
Tren más agudo al acercarse. (De Cántico Cósmico, fragmentos: Cantiga 4)
(...)
Los cuerpos celestes
y los nuestros.
«Estrellas caminantes» -los caldeos. (A las no fijas.)
En griego caminante es planetes, así que
habitamos una estrella caminante.
Los hombres que formamos el Hombre
o mejor dicho formaremos.
O tenemos por delante solamente
un planeta pelado como Marte.
Una nube en forma de hongo levantándose lentamente
en el horizonte...
La Guerra de las Galaxias que llamó el Wall Street Journal
«Dólares caídos del cielo».
Wall Street Journal Neandertal.
Pero no. Tenemos por ejemplo
la evolución del tiburón primitivo hasta convertirse en paloma.
El instinto de muerte en el hombre
no es heredado de antecesores animales.
También la biología enseña:
los animales pacíficos son favorecidos por la selección.
Los grupos asesinos dentro de una misma especie no prosperan.
(Somozas, Pinochet, etc.) Los gorilas son meditabundos,
les gusta pasar el tiempo en contemplación.
Que la solución de todos los problemas sociales de China
era el amor
fue descubierto 5 siglos antes de nuestra era.
La ayuda del hombre al hombre
que para Plinio es Dios.
La encarnación de Dios en nuestra biología.
En nuestra condición todavía de mamíferos.
Jesús: con los cromosomas de Adán...
A sólo 1 millón de años del Pithecanthropus erectus.
El gobierno enraizado en el cielo que decía Confucio.
No los dólares del cielo.
Hemos dejado excremento en bolsas plásticas en la luna.
Ya antes conocieron el mes lunar los mayas
errando sólo 34 segundos.
34 segundos
en un tiempo para ellos infinito, sin principio ni fin.
Los enemigos de la evolución (Somoza etc.)
Contra-evolucionarlos.
¿Cómo puede haber desempleo en el planeta?
Pero hay una torre que queremos construir, decía Chuang-Tsé
que llegue hasta el infinito.
Comemierdas contraevolucionarios.
En aquel día hasta la belleza física será igualitaria.(De Cántico Cósmico, fragmentos: Cantiga 9, https://www.youtube.com/watch?v=gVHBYxK3w8c)
Fuente: Va Con Firma
Por Gerardo Burton.
Cuando era todavía un joven de la clase alta nicaragüense, Ernesto Cardenal y su amigo José Coronel Urtecho, tradujeron a los poetas norteamericanos desde los aborígenes hasta los nacidos en la tercera década del siglo pasado. Ese libro es un homenaje a su maestro Ezra Pound.
En 1972, un libro de notas de viaje tomadas por un poeta irrumpió como un tornado caribeño en los hábitos de lectura del público argentino y acaso latinoamericano. Era un librito de 370 páginas, casi de bolsillo -mide 11 por 19 centímetros- y su autor era un nicaragüense cuyo poema más conocido era un epigrama de amor no correspondido que se vendía en posters:
Al perderte yo a ti
Tu y yo hemos perdido:
Yo por que tú eras
Lo que yo más amaba
Y tú por que yo era
El que te amaba más.
Pero de nosotros dos
Tú pierdes más que yo:
Porque yo podré amar a otros
Como te amaba a ti,
Pero a ti no te amarán
Como te amaba yo.
Parecía más un anuncio publicitario ingenioso que el poema de un monje trapense que había fundado una comunidad religiosa en una pequeña isla -Solentiname- del gran lago de Nicaragua y que se autodefinía como revolucionario. La tapa del libro en cuestión era de fondo negro, con la palabra CUBA en rojo, a todo lo ancho y en cuerpo mayor, la preposición EN muy pequeña y unas líneas blancas que, sobre el fondo negro, semejaban un mar calmo. El autor de ese relato de viajes murió hace unos días a los 95 años. Ernesto Cardenal tenía entonces casi cincuenta años y su poesía ya había atravesado varios ismos. Desde la imitación de los clásicos latinos (Marcial, Catulo) para construir esos "Epigramas" con que lamentaba o exageraba, no sin ironía, sus fracasos de amor al tiempo que relataba la lucha contra la dictadura somocista. En esos versos nada románticos, cuasi sarcásticos, las mujeres eran las compañeras de ruta con quienes buscaba la liberación aun lejana, pero también eran crueles en su desdén. Tiranas en su indiferencia con el poeta.
De estos cines, Claudia, de estas fiestas,
de estas carreras de caballos,
no quedará nada para la posteridad
sino los versos de Ernesto Cardenal para Claudia
(si acaso)
y el nombre de Claudia que yo puse en esos versos
y los de mis rivales, si es que yo decido rescatarlos
del olvido, y los incluyo también en mis versos
para ridiculizarlos.
Tú no vales siquiera un epigrama.
Si tú estás en Nueva York
en Nueva York no hay nadie más
y si no estás en Nueva York
en Nueva York no hay nadie.
Me contaron que estabas enamorada de otro
y entonces me fui a mi cuarto
y escribí este artículo contra el Gobierno
por el que estoy preso.
Si cuando fue la rebelión de abril
me hubieran matado con ellos
yo no te habría conocido:
y si ahora hubiera sido la rebelión de abril
me hubieran matado con ellos.
De "Epigramas":
Cuando era todavía un joven de la clase alta nicaragüense, Cardenal y su amigo, el también poeta José Coronel Urtecho, tradujeron la poesía norteamericana desde la de los aborígenes, conservada en museos o por tradición oral (sioux, apaches, apalaches, chippewa, navajos, cheyenes y otros) hasta la escrita por los nacidos en la tercera década del siglo pasado. El libro, "Antología de la poesía norteamericana", no sólo es un clásico en la industria editorial (lo publicó Aguilar de España en 1962) sino que además representa una suerte de homenaje al primer gran maestro que tuvo Cardenal: Ezra Pound. De Pound, dirá luego Cardenal, aprendió que en la poesía se pueden contraponer imágenes, dos cosas contrarias que, al estar juntas, producen una tercera imagen; que es necesario entrar directamente en los hechos como lo hace una cámara fotográfica, sin adjetivos ni palabras superfluas. En la poesía, según Pound, entra todo además del lirismo convencional: las estadísticas, los números, la astronomía, las ciencias, la historia, la crónica periodística, la publicidad. Del imaginismo de Pound, Cardenal, Coronel Urtecho y sus compañeros extrajeron el exteriorismo, cuyos rasgos principales son la intertextualidad, que incorpora también palabras de otras lenguas, muertas o vivas, la ausencia de retórica, el prosaísmo y el tono convencional. Cardenal, que siempre decía que Coronel Urtecho era su verdadero maestro, solía afirmar que la poesía actual no se entiende, no llega a la gente, porque los poetas hablan para sí mismos y no para el pueblo. Les interesa más cómo suena un poeta entre poetas que cómo se escucha en un estadio, dice, en un sindicato, en un teatro, en una manifestación. Este tema resulta crucial en su trayectoria poética, dado que de los epigramas del principio, que muestran la relación yo-tú enmarcada en la lucha política contra Somoza, Cardenal pasó a la búsqueda histórica en un doble rumbo: el de la historia de los pueblos aborígenes de la América entera, de donde nace su "Homenaje a los indios americanos", quizás el libro que más tributo rinde a Pound, y a la historia de la conquista del continente por españoles, británicos y otros europeos ("El estrecho dudoso"), las luchas por la independencia luego y contra el imperialismo norteamericano al final. "Oráculo sobre Managua" y "Canto nacional (para el Frente Sandinista de Liberación Nacional)" son los dos libros más imbricados en la lucha política previa a la revolución que triunfó en 1979 y de la cual fue funcionario.
-Tragátela- Me dijo el Coronel Somoza Debayle -¿No es
tu propia sangre? No te hará daño-
Empecé a declarar mentiras, la voz entrecortada, las taquígrafas
recogiéndolo en el papel con su lápiz veloz..."
Entre tortura y tortura él veía una película.
...
Entonces no sabíamos que los presos estaban con las fieras.
La pantera negra había sido regalo de Castillo Armas
lo que no era muy tranquilizador que digamos. Somoza
gordo lleno de condecoraciones como un árbol de Navidad.
Los seminaristas iban de paseo a Acahualinca a ver las huellas.
Sucedió que te metiste a la clandestinidad y moriste en la guerrilla urbana
Toda vida uneune y no divide(integra)
Por eso diste tu vida vos
en el quinto planeta de una estrella mediana de la Vía Láctea.
...
Por eso vos Leonel Rugama poeta de 20 años te metiste a la guerrilla urbana.
Ex-seminarista, marxista, decías en la cafetería La India que la revolución
es la comunión con la especie.
...
Una nueva sociedad un nuevo cielo y una nueva tierra
también la producción del tiempo libre
y con el desarrollo de la capacidad de producción
el desarrollo de la vida interiorun hombre nuevo y un nuevo canto
por eso moriste en la guerrilla urbanaun hombre nuevo que sueñe nuevos sueños.
Y en Cuba hay palabras desaparecidas como:
Bayú (burdel); Capataz; Criada; Chulo.
También Garito; Fletera (prostituta); Garrotero (prestamista)
Esto casi no es un poema
Quiero decir: hay palabras que en Cuba los jóvenes no conocen.
Desaparecieron los dinosaurios del Jurásico
La vida de cada uno más rica y más hermosa
La evolución es por saltos dijo Mao
la evolución es la revolución
la revolución no es ilusión
la oruga teje a su alrededor una nueva morada
de la que sale con alas de colores con las cuales vuela hacia el cielo
Vos Leonel Rugama acribillado y llevado a la morgue
manchado de tierra y sangre dijo "La Prensa"
fuiste la luz al final de un túnel. (Oráculo sobre Managua, fragmentos)
A lo largo de ese proceso inicial, a sus treinta años se convierte al catolicismo, decide ser sacerdote y a partir de ello su poesía incorpora un importante componente místico. Esto ocurre a partir, fundamentalmente, de su ingreso al monasterio trapense de Nuestra Señora de Gethsemaní en Kentucky, Estados Unidos, donde encuentra a su segundo gran maestro: Thomas Merton, que es designado su director espiritual. De este período son sus "Oración por Marilyn Monroe" y sus "Salmos", y la poesía religiosa posterior que tiene una dimensión cósmica, añadida y superpuesta a las características revolucionarias e históricas que ya tenía. El verso no sólo libre sino abierto, expansivo a la manera de Whitman y de Neruda, con esos golpes rítmicos que recuerdan el oleaje del mar, colaboran para sostener tanta información, tanto contenido. Como su antecesor y coetáneo Rubén Darío inventó el modernismo a partir del simbolismo francés, Cardenal fue el beatnik de América Latina, contemporánea su poesía a la de sus pares de Estados Unidos. Así, no compone sólo un poema ni una sinfonía ni una ópera. Su poesía incorpora todo, con un apetito voraz, y lo transforma en belleza, en liberación, en esperanza sólida, material.
Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido ni
asiste a sus mítines
ni se sienta a la mesa con los gánsters
ni con los Generales en el Consejo de Guerra
Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano
ni delata a su compañero de colegio
Bienaventurado el hombre que no lee los anuncios comerciales
ni escucha sus radios
ni cree en sus slogans
Será como un árbol plantado junto a una fuente. (Salmo 1)
Líbrame Señor
de la S.S. de la N.K.V.D. de la FBI de la G.N.
Líbrame de sus Consejos de Guerra
De la rabia de sus jueces y sus guardias
Tú eres quien juzga a las grandes potencias
Tú eres el juez que juzga a los Ministros de Justicia
y a las Cortes Supremas de Justicia
¡Defiéndeme Señor del proceso falso!
Defiende a los exiliados y los deportados
los acusados de espionaje y sabotaje
condenados a trabajos forzados
Las armas del Señor son más terribles
que las armas nucleares!
Los que purgan a otros serán también purgados
Pero yo te cantaré a ti porque eres justo
Te cantaré en mis salmos / en mis poemas (Salmo 7)
Quizás en ese encuentro con Merton su poesía haya dado una nueva torsión: de la historia (o de la crónica histórica de "Homenaje...", "El estrecho..." u "Hora 0"). Cardenal vuelve mística su poesía pero nunca intimista o individualista: la revolución lo lleva a la religión y la religión sostiene la revolución. Merton señala el camino de la contemplación, enseña que el universo es un organismo vivo de la misma estatura que la humanidad, y que la redención cristiana opera no sólo en la carne y el alma de la mujer y del hombre sino también, y sobre todo, en la materia. La materia tiene espíritu y marcha hacia su total liberación, parece decir Cardenal acaso inspirado por Teilhard de Chardin. En cada estrella, dice en algún poema, hay materia humana, y en cada humano, hay materia de la estrellas. La coherencia entre la práctica política, la historia, la poesía y la fe cristiana llevan casi naturalmente a Cardenal a esa convicción de una convergencia del mundo en el final de los tiempos. Sus poemas finales eluden el individualismo porque todo (otra vez Teilhard) se subordina a un mundo transparente, diáfano, que universaliza la historia a la manera del Evangelio de Juan: Cristo es el Alfa y el Omega, es el Logos del principio y el Cordero de los últimos tiempos, y hacia ese punto marcha el universo en su totalidad.
Explosión hace 20.000 millones de años.
Aún ha quedado un vago rumor de esa explosión,
ondas de radio venidas de las profundidades del espacio,
algo que se percibe en la televisión, dicen,
cuando está a todo volumen sin ningún canal.
Como mil millones de galaxias han visto los telescopios
en un área de mil millones de años luz.
Trenes en la noche alejándose de una estación.
El silbido es más agudo al acercarse
y es más grave cuando se va alejando.
Primero una infinita condensación de la materia.
Y del matrimonio de protones con neutrones
se produjo la vida.
¿Qué hay en una estrella? Nosotros mismos.
Todos los elementos de nuestro cuerpo y del planeta
estuvieron en las entrañas de una estrella.
Somos polvo de estrellas.
hace 15.000.000.000 de años éramos una masa
de hidrógeno flotando en el espacio, girando lentamente, danzando.
Y el gas se condensó más y más
cada vez con más y más masa
y la masa se hizo estrella y empezó a brillar.
Condensándose se hacían calientes y luminosas.
La gravitación producía energía térmica: luz y calor.
Como decir amor.
Nacían, crecían y morían las estrellas.
Y la galaxia fue tomando forma de flor
como hoy la vemos en la noche estrellada.
Nuestra carne y nuestros huesos vienen de otras estrellas
y aun tal vez de otras galaxias,
somos universales,
y después de la muerte contribuiremos a formar otras estrellas
y otras galaxias.
De las estrellas somos y volveremos a ellas.
Tren más agudo al acercarse
Y los objetos celestes más azules al acercarse
y más rojos si se alejan.
Por qué es negra la noche...
Es negra por la expansión del universo.
Si no, todo el cielo brillaría como el sol.
Y no habría ninguno para ver esa noche.
¿Y las galaxias hacia dónde van?
En expansión como el humo dispersado por el viento.
La segunda ley de la termodinámica:
Este constante fluir de la luz a las tinieblas.
Del amor al olvido.
Él tenía 20 años, ella 15 cumpliendo 16.
Iluminación en las calles y en el cielo. El cielo
el de Granada.
Fue el último adiós,
y fue cuando él le recitó a Neruda:
".... los versos más tristes esta noche".
"La noche está estrellada
y tiritan azules los astros a lo lejos."
Dos seres se separaron para siempre.
No hubo ningún testigo en aquel adiós.
Las dos direcciones cada vez más divergentes
como estrellas desplazándose hacia el rojo.
He pensado otra vez en vos, porque la noche está estrellada
y miro temblar los astros a lo lejos con su luz azulosa.
Tren más agudo al acercarse. (De Cántico Cósmico, fragmentos: Cantiga 4)
(...)
Los cuerpos celestes
y los nuestros.
«Estrellas caminantes» -los caldeos. (A las no fijas.)
En griego caminante es planetes, así que
habitamos una estrella caminante.
Los hombres que formamos el Hombre
o mejor dicho formaremos.
O tenemos por delante solamente
un planeta pelado como Marte.
Una nube en forma de hongo levantándose lentamente
en el horizonte...
La Guerra de las Galaxias que llamó el Wall Street Journal
«Dólares caídos del cielo».
Wall Street Journal Neandertal.
Pero no. Tenemos por ejemplo
la evolución del tiburón primitivo hasta convertirse en paloma.
El instinto de muerte en el hombre
no es heredado de antecesores animales.
También la biología enseña:
los animales pacíficos son favorecidos por la selección.
Los grupos asesinos dentro de una misma especie no prosperan.
(Somozas, Pinochet, etc.) Los gorilas son meditabundos,
les gusta pasar el tiempo en contemplación.
Que la solución de todos los problemas sociales de China
era el amor
fue descubierto 5 siglos antes de nuestra era.
La ayuda del hombre al hombre
que para Plinio es Dios.
La encarnación de Dios en nuestra biología.
En nuestra condición todavía de mamíferos.
Jesús: con los cromosomas de Adán...
A sólo 1 millón de años del Pithecanthropus erectus.
El gobierno enraizado en el cielo que decía Confucio.
No los dólares del cielo.
Hemos dejado excremento en bolsas plásticas en la luna.
Ya antes conocieron el mes lunar los mayas
errando sólo 34 segundos.
34 segundos
en un tiempo para ellos infinito, sin principio ni fin.
Los enemigos de la evolución (Somoza etc.)
Contra-evolucionarlos.
¿Cómo puede haber desempleo en el planeta?
Pero hay una torre que queremos construir, decía Chuang-Tsé
que llegue hasta el infinito.
Comemierdas contraevolucionarios.
En aquel día hasta la belleza física será igualitaria.(De Cántico Cósmico, fragmentos: Cantiga 9, https://www.youtube.com/watch?v=gVHBYxK3w8c)
Fuente: Va Con Firma