América Latina: Casi la mitad de la población no tiene acceso a una vivienda dignaSPUTNIK
La jefa de la División de Vivienda y Desarrollo Urbano del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Tatiana Gallego, aseguró este 25 de julio que casi la mitad de la población en América Latina y el Caribe no tiene acceso a una vivienda digna.
"América Latina y el Caribe tienen un rezago habitacional, dinámico, que desde el BID calculamos que afecta al 45% de la población", afirmó Gallego durante el Tercer Foro de Vivienda, organizado por el organismo internacional.
El déficit habitacional es una cifra que sintetiza las deficiencias en vivienda y hábitat. En ese sentido, el déficit sube desde la ausencia total de vivienda hasta la ausencia de condiciones que aseguren una vida digna.
El BID, además, define al déficit habitacional como la combinación de requerimientos cuantitativos y cualitativos.
El déficit cuantitativo refiere a la ausencia de vivienda a partir de dos condiciones:
Que el número de familias que comparten el mismo techo y comparten las facilidades de preparación de las comidas sea superior a una.
Que haya familias que habitan en viviendas que no pueden ser mejoradas dada la baja calidad de los materiales de construcción.
En tanto, el déficit cualitativo no incluye las viviendas consideradas en el déficit cuantitativo y se define a partir de las siguientes limitaciones:
Techo hecho de materiales no permanentes.
Paredes y estructura hecgas de materiales no permanentes.
Suelos de tierra.
Hacinaiento (más de tres personas por cuarto).
Condiciones deficientes de vecindario (insuficiencia de infraestructura o servicios: ausencia de agua potable con acceso por tuberías; ausencia de cloacas o sistemas de disposición de aguas servidas; ausencia de electricidad).
De esa manera, Gallego estimó que cerca del 95% del déficit habitacional es cualitativo y se focaliza sobre todo en las zonas urbanas, "aunque solo sea porque más del 80% de la población en América Latina y el Caribe vive en ciudades".
Sin embargo, al contrastar las cifras a nivel regional, se observa que el déficit habitacional es dispar, toda vez que en Costa Rica, por ejemplo, el 11% de la población está en rezago.
"Desde el BID creemos que necesitamos diseñar soluciones de política habitacional que respondan a esta cara cambiante de la región y que involucren tanto al sector público como al sector privado", aseveró Gallego.
El Tercer Foro de Vivienda es un encuentro organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo para abordar el déficit habitacional en América Latina.
En esta edición participaron representantes de Paraguay, Guatemala, República Dominicana, Panamá, El Salvador y Argentina, quienes coincidieron en que la informalidad laboral es uno de los principales obstáculos para el acceso a la vivienda.
SPUTNIK
La jefa de la División de Vivienda y Desarrollo Urbano del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Tatiana Gallego, aseguró este 25 de julio que casi la mitad de la población en América Latina y el Caribe no tiene acceso a una vivienda digna.
"América Latina y el Caribe tienen un rezago habitacional, dinámico, que desde el BID calculamos que afecta al 45% de la población", afirmó Gallego durante el Tercer Foro de Vivienda, organizado por el organismo internacional.
El déficit habitacional es una cifra que sintetiza las deficiencias en vivienda y hábitat. En ese sentido, el déficit sube desde la ausencia total de vivienda hasta la ausencia de condiciones que aseguren una vida digna.
El BID, además, define al déficit habitacional como la combinación de requerimientos cuantitativos y cualitativos.
El déficit cuantitativo refiere a la ausencia de vivienda a partir de dos condiciones:
Que el número de familias que comparten el mismo techo y comparten las facilidades de preparación de las comidas sea superior a una.
Que haya familias que habitan en viviendas que no pueden ser mejoradas dada la baja calidad de los materiales de construcción.
En tanto, el déficit cualitativo no incluye las viviendas consideradas en el déficit cuantitativo y se define a partir de las siguientes limitaciones:
Techo hecho de materiales no permanentes.
Paredes y estructura hecgas de materiales no permanentes.
Suelos de tierra.
Hacinaiento (más de tres personas por cuarto).
Condiciones deficientes de vecindario (insuficiencia de infraestructura o servicios: ausencia de agua potable con acceso por tuberías; ausencia de cloacas o sistemas de disposición de aguas servidas; ausencia de electricidad).
De esa manera, Gallego estimó que cerca del 95% del déficit habitacional es cualitativo y se focaliza sobre todo en las zonas urbanas, "aunque solo sea porque más del 80% de la población en América Latina y el Caribe vive en ciudades".
Sin embargo, al contrastar las cifras a nivel regional, se observa que el déficit habitacional es dispar, toda vez que en Costa Rica, por ejemplo, el 11% de la población está en rezago.
"Desde el BID creemos que necesitamos diseñar soluciones de política habitacional que respondan a esta cara cambiante de la región y que involucren tanto al sector público como al sector privado", aseveró Gallego.
El Tercer Foro de Vivienda es un encuentro organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo para abordar el déficit habitacional en América Latina.
En esta edición participaron representantes de Paraguay, Guatemala, República Dominicana, Panamá, El Salvador y Argentina, quienes coincidieron en que la informalidad laboral es uno de los principales obstáculos para el acceso a la vivienda.